En solidaridad, familiar de “Mary Chuy” se encadenó junto a ella

Por Eduardo Delgado

María de Jesús Almendárez Prieto cumplió este martes una semana encadenada en oficinas de la Oficialía Mayor de Gobierno del Estado: hoy una familiar de “Mary Chuy” se encadenó junto a ella en ausencia de la solidaridad de feministas, diputadas, de su sindicato, así como de las responsables de instituciones públicas dedicadas a la defensa de mujeres.

En rueda de prensa que la afectada ofreció en presencia de Mónica Tenorio Solano, Visitadora Adjunta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, reportó que ese organismo le retiró la presencia de observadoras que la acompañaban las 24 horas del día, por órdenes de Manuel Durán, responsable de quejas, y por ende manifestó su temor a ser víctima de un feminicidio.

Informó que su sobrina política, Juana María Cepeda, se encadenó junto a ella en demanda de su reintegración a la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obras Públicas (SEDUVOP), como estableció el organismo defensor de los derechos humanos en su recomendación 03/2017, girada la semana pasada.

“Si el gobernador Juan Manuel Carreras López no entiende, se van a unir más”, anticipó. Criticó también la falta de solidaridad femenil en su acto de protesta: “¿Qué no hay mujeres en San Luis Potosí?”, cuestionó.

“Al no haber activismo se está uniendo mi familia. Nada más cuento con mi familia, porque no cuento con mujeres ni con activistas”, añadió. Por ende, acotó, ya pidió también la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

La directora del Instituto de las Mujeres del Estado, Erika Velázquez, contra quien presentó una denuncia penal porque la discriminó durante su estancia en ese organismo, “no se ha parado aquí”, refirió.

“El gobernador a mí me contestó que este es un problema entre particulares y no, es un problema de derechos humanos”, aseveró “Mary Chuy”.

Julieta Méndez Salas preside el Centro de Justicia para Mujeres y la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAV), sin embargo tampoco ha acudido a visitarla. “No sé si gana dos sueldos…lo voy a investigar, pero no se ha pronunciado”, condenó.

Criticó que la diputada priista Martha Orta Rodríguez presentó una iniciativa para crear el Centro de Justicia para Mujeres, pero no la ha visitado en un acto de solidaridad entre congéneres.

“Pido apoyo al Poder Legislativo…, porque son mujeres, sin embargo nadie me está ayudando, nadie me está brindando la protección y estoy en riesgo de un feminicidio”, advirtió.

Porque, recordó, el pasado sábado fue detectado un hombre sospechoso cerca de las oficinas donde ha pasado una semana encadenada y por esa razón “ya tengo esto”, una lámpara con descargas eléctricas, la cual mostró.

Toda vez, deploró, porque las agentes de policía estatal asignadas a la vigilancia de la Oficialía Mayor tiene la encomienda de cuidar el inmueble “no ha mi”, condenó.

Reiteró que desde el pasado sábado a pernoctado acompañada por familiares, que también ha resultado perjudicados por las condiciones en que la ven a ella y porque descuidan sus actividades ordinarias por estar pendientes de ella.

“Yo no soy reo, soy víctima y tan así que estoy (inscrita) en un banco de víctimas”, acotó. Dijo que recibe la visita de un médico pero no le da medicamento, pese a que padece diabetes.

Expuso que su sobrina también es diabética y al encontrarse encadenada expone su salud, sin embargo está dispuesta a acompañarla hasta que le resuelvan. Próximamente, adelantó, otros familiares se van a turnar para encadenarse también.

En tanto, consideró, ella seguirá “presa”, señala: “¿qué me falta para ir a la cárcel?…aquí estoy durmiendo en el suelo; a lo mejor están mejor los presos que yo”.

En contra parte, Juan Martín Gatica Izaguirre, quien abusó y la acosó sexualmente hace cuatro años en la SEDUVOP “está a faldas de Bernardina”, la dirigente del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio de Gobierno del Estado.

Ello a pesar, abundó, de que le fue dictado un auto de formal prisión y tiene que acudir a revista periódicamente al reclusorio. “¿Por qué no lo han cesado?”, cuestionó.

Dijo que durante los 21 años que lleva como empleada de Gobierno “nunca había visto a Bernardina de manera tan encarnecida defendiendo a un trabajador”.

“Mary Chuy” expuso que la única que la ha visitado fue Gloria Serrato Sánchez, pero “porque yo le pedí la ayuda” y sólo fue a decirle que únicamente faltaba comprar un escritorio para reintegrarla a la SEDUVOP.

“Han pasado ocho días (de eso) y sigo esperando ese escritorio; o sea puras mentiras. No saben cómo resolver y Bernardina está por encima del Gobernador”, condenó.

Garantizo que ella no claudicará en su lucha: “Que eso lo entienda el Gobernador…que (sólo) me sacan de aquí con los dos pies adelante, me mandan al servicio médico o a la SEDUVOP”, finalizó.

 

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