Texto y fotografías de Desiree Madrid
La explanada del Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” se convirtió este jueves en el epicentro de una manifestación protagonizada por trabajadores activos y jubilados de la institución, quienes alzaron la voz para exigir el cumplimiento de diversas prestaciones, el pago de adeudos y el cese de prácticas de hostigamiento laboral que, aseguran, persisten en el ambiente.
Con una marcada indignación, los manifestantes expresaron su hartazgo ante una serie de omisiones que han afectado su situación económica y laboral.
Entre las demandas más sentidas, se escuchó el grito unificado de “¡Exigimos pagos pendientes de tiempo extra, vacaciones de riesgo, prima de antigüedad!”, para evidenciar la necesidad de saldar estas deudas históricas.
Los reclamos también se extendieron a “pagos pendientes de INFONAVIT, IMSS, FONACOT”, lo que golpea directamente su seguridad social y patrimonio.
El clamor de los jubilados resonó con particular fuerza, pues un grupo de ellos demandó el pago de su prima de antigüedad y finiquito, prestaciones fundamentales tras años de servicio y que no han sido cubiertas.
Una pancarta lo decía claramente: “Nosotras Jubiladas exijo mis derechos: prima de antigüedad y finiquito”.
Este punto trajo a la memoria la situación vivida en febrero de este mismo año, cuando otro grupo de médicos jubilados del Hospital Central protagonizó una protesta similar por la falta de pago de sus pensiones.
En aquella ocasión, la problemática fue finalmente resuelta y absorbida por el Gobierno del Estado, lo que generó expectativas de que esta nueva manifestación también encuentre una pronta y favorable solución.
El ambiente de la protesta también estuvo impregnado por denuncias de hostigamiento laboral, con varias pancartas que expresaban un llamado rotundo al “¡Respeto a nuestras condiciones de trabajo!” y a poner fin a las prácticas de acoso.
Una de las consignas señalaba directamente a una figura: “L.E. Claudia Liliana García obstaculiza procesos administrativos de los trabajadores”, lo que evidencia la tensión y el descontento interno.
Otro cartel sentenciaba: “Basta de opresión”, mientras que un mensaje se le leía “Pidiendo nuestros derechos no al hostigamiento Laboral. Pagos a Prestaciones”.
El repudio a la corrupción no se hizo esperar, ya que los manifestantes pedían la salida de “¡servidores públicos corruptos del Hospital Central!”, ante su desconfianza en la actual gestión y la urgencia de una limpieza institucional.
La manifestación se desarrolló de manera pacífica, con los trabajadores expresando sus reclamos a través de sus voces y la contundencia de sus mensajes plasmados en las cartulinas.
Se confirmó que un grupo de representantes de los manifestantes fue recibido en una reunión privada con los directivos del Hospital Central.
En este encuentro, los directivos manifestaron su disposición a entablar un diálogo constructivo sobre las exigencias planteadas y explorar vías para dar solución a sus demandas.
La comunidad laboral del Hospital Central se mantiene expectante ante los resultados de estas negociaciones, con la advertencia de que, de no obtener respuestas satisfactorias, podrían llevar a cabo nuevas acciones para asegurar el cumplimiento de sus legítimos derechos.
