María Ruiz
La clausura de una sucursal de Domino’s Pizza en la capital potosina no fue un acto de represalia ni una respuesta a mensajes críticos en redes sociales, sino una medida legal ante la falta de permisos, aseguró el secretario general del Ayuntamiento de San Luis Potosí, Fernando Chávez Méndez.
“No tiene absolutamente nada que ver con venganzas. Es una coincidencia desafortunada que los propietarios están usando para desviar la atención”, subrayó Chávez, quien además rechazó que el cierre tenga relación con el mensaje difundido por la pizzería, donde se hacía alusión a que “están clausurando todo”.
Chávez señaló que la clausura responde a un incumplimiento evidente.
“Este establecimiento no contaba con licencia de funcionamiento vigente. Y como a cualquier otro negocio, se le invitó a regularizarse. Cuando no hay documentación mínima, simplemente no se puede operar”, sostuvo.
La administración municipal, dijo, ha sostenido un programa de verificación que lleva más de cuatro meses y que ha detectado una larga lista de comercios —incluidas grandes franquicias— que operan fuera de la norma.
“Hay muchos establecimientos que ni siquiera nos imaginamos que funcionan sin tener su documentación al día”, advirtió.
El funcionario también cuestionó la narrativa que intenta convertir una falta administrativa en una persecución política o comercial.
“Lamento que los responsables quieran victimizarse. No se trata de un caso aislado ni dirigido; se está revisando todo tipo de giros: farmacias, restaurantes, centros nocturnos… todos deben estar regulados”, dijo.
Sobre por qué en este caso específico no se otorgó un plazo para regularizarse —como ha ocurrido con otros negocios— Chávez no ofreció una respuesta clara.
“No tengo el dato exacto de desde cuándo no tenían los permisos, ni detalles sobre si se les ofreció un periodo de tolerancia. Lo que sí sé es que no contaban con la documentación básica”.
En respaldo a esta postura, el director de Comercio Municipal, Ángel de la Vega Pineda, insistió en que la clausura se ejecutó “con estricto apego a la legalidad” y que no existe ningún tipo de consigna para actuar contra negocios específicos.
“No trabajamos para afectar al comercio. Lo que buscamos es ordenar y regularizar las actividades en toda la ciudad”, señaló.
De la Vega recordó que este programa ha clausurado negocios de todo tipo, y reiteró la invitación a los empresarios a acercarse a la Dirección de Comercio para resolver cualquier situación pendiente.
“Aquí hay apertura y facilidades, pero también hay un compromiso con el orden y la seguridad”, afirmó.