La reforestación en la Sierra de San Miguelito y un gobierno estatal sin agenda verde

Por Victoriano Martínez

A mil 409 días de iniciado el actual gobierno (el pasado 5 de agosto), la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (SEGAM) informó sobre acciones de una supuesta agenda verde, cuyo inicio anunció el gobernador Ricardo Gallardo Cardona que iniciaría en mayo pasado, limitada a tres: el transporte Metro Red, reforestaciones y capacitaciones a funcionarios municipales.

A 781 días de que termine el sexenio –es decir, poco más del último tercio del periodo de gobierno– al informar lo anterior se pretendió hacer creer que ya se trabaja con una agenda verde cuando en realidad exhiben un alto grado de simulación al reportar acciones aisladas sin un programa para integrar la sostenibilidad ambiental en las políticas públicas.

Para colmo, la que más se acerca a una política ambiental, las reforestaciones, tiene en su haber una sospecha muy grande de simulación que, en días pasados, dejó registro de un episodio de abierta y descarada simulación cuando Gallardo Cardona anunció una reforestación con un millón de árboles para la Sierra de San Miguelito.

No sólo se trató de una declaración inverosímil que incluía la afirmación de que ya se contaba con las primeras 300 mil plantas, sino que con el objetivo de dar veracidad al fantasioso anuncio, Sonia Mendoza Díaz, titular de la SEGAM, pretendió hacer pasar una reunión con la representación de SEMARNAT como de preparativos de esa reforestación.

Angélica Montañez Rivera, representante de SEMARNAT en el Estado, no sólo desmintió a Mendoza Díaz, sino que además aclaró que desde 2022 han acompañado y trabajado con diversas comunidades y ejidos, organizaciones como Guardianes de la Sierra de San Miguelito, en coordinación con la CONANP, CONAFOR, Sociedad Civil, Guardia Nacional y al director del Área Natural Protegida, en labores de reforestación.

“Entregamos 350 mil árboles o plantas, o individuos a los presidentes municipales para que sigan; ahorita vamos a continuar con los 250 mil que estamos por obtener, y eso es un trabajo permanente”, afirmó Mendoza Díaz al dar a conocer las acciones sobre la presunta agenda verde.

¿Qué tan creíble puede ser esa afirmación cuando Mendoza Díaz fue capaz de hacer pasar una reunión con una funcionaria federal como preparatoria de una reforestación de la que ya no habló en ese informe a pesar de que ya se contaba con 300 mil de un millón de árboles para reforestar al Área Natural Protegida (ANP) Sierra de San Miguelito?

Entregar 350 mil árboles y tener en puerta la entrega de 250 mil más no es una acción menor y sí es de tal magnitud que, tan dados a publicitar cualquier entrega –sea de despensas o útiles escolares–, resulta sospechoso que simplemente se afirme que fueron entregados y no se muestre ni una sola fotografía o un video de tales actos.

Un millón de árboles para la Sierra de San Miguelito se esfumaron del anuncio al desmentido, tras pasar por la advertencia sobre el cuidado y los preparativos que exige una reforestación en una ANP y, de paso, exhibieron su falta de vinculación con el Gobierno Federal, la ciudadanía, asociaciones civiles, y colectivos que ya trabajan en acciones concretas a favor del medio ambiente.

Una desvinculación que nuevamente se concretó en los hechos este domingo cuando se realizó la segunda jornada de reforestación de la Sierra de San Miguelito de este año, encabezada por los Guardianes de la Sierra, con el apoyo de dependencias federales a las que en esta ocasión se sumaron la Secretaría de la Defensa Nacional y la Procuraduría Agracia Nacional… y la SEGAM ausente.

En esta segunda reforestación participaron 130 brigadistas en la comunidad de San Luis Gonzaga, del municipio de Villa de Arriaga, con 2 mil plantas y se anunció la siguiente jornada para el 24 de agosto en Miguel Hidalgo, en el municipio de Mexquitic de Carmona.

La incongruencia de Gallardo Cardona y Mendoza Díaz, con su hoy desaparecida reforestación con un millón de árboles, queda evidente al evitar participar en estas reforestaciones, supervisadas, autorizadas y con el acompañamiento de la SEMARNAT y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.

Una incongruencia que sólo confirma que, si en uno sólo de los aspectos más trascendentes de acciones propias de una agenda verde falla de esa manera, tras casi dos tercios del sexenio el gobierno verde ecologista de Gallardo Cardona o ignora qué es una agenda verde o no tiene la más mínima convicción y compromiso para proteger el medio ambiente.