Estela Ambriz Delgado
Ante la posibilidad de los ejidos El Peyote y Peotillos de realizar mejores negociaciones de la ocupación previa de sus tierras de uso común para la construcción de la carretera de cuota Entronque 75-D Matehuala, han surgido voces de los núcleos agrarios que, aunque aceptaron entre 50 y 60 pesos por metro cuadrado, piden ser apoyados para obtener mayores ganancias, lo que el ingeniero agroecólogo Pedro Nájera Quezada considera que puede ser posible si se unen y lo exigen.
Luego de que en días pasados representantes de los ejidos El Peyote y Peotillos se reunieron con el procurador agrario a nivel nacional, Víctor Suárez Carrera, para ser orientados sobre las posibilidades de negociación con la empresa constructora, a fin de mantener su solicitud de 400 pesos por metro cuadrado en efectivo y obra social, otros ejidos que sí aceptaron el ofrecimiento de 50 pesos piden una revisión a sus casos.
Al respecto el agroecólogo, quien también participado en la asesoría de El Peyote y Peotillos, consideró que estos otros ejidos como La Tapona, Del Coyote y Llano del Carmen, tendrían que hacer el reclamo por el abuso que realizaron estas empresas, quienes se aprovecharon de la falta de conocimiento y la precariedad económica de los ejidatarios, además, deberán buscar que la Procuraduría Agraria haga una revisión de sus casos.
Con el trato que aceptaron, estos núcleos agrarios han sido vulnerados económica y territorialmente, ya que quedarán divididos por la autopista y con ello verán afectadas sus actividades productivas, entre otros posibles efectos como la escasez de agua por la interrupción de corrientes naturales, por lo que es necesario que se mejoren las condiciones de sus tratos y que sus habitantes hagan otras propuestas.
No obstante, Nájera Quezada reconoció que uno de los retos que enfrentan estos núcleos agrarios es la falta de integración y politización a su interior. Además de que es una realidad que las condiciones que puedan obtener algunos no se podrá repetir en su totalidad en cada ejido.