María Ruiz
En San Luis Potosí capital, el aumento de accidentes en motocicleta ha abierto un debate entre la visión oficial y la de colectivos ciudadanos. Mientras el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de la capital, Juan Antonio Villa Gutiérrez, insiste en que la prioridad es reforzar el uso de cascos certificados y sancionar a quienes no cumplen con la norma, la organización Pedaleando San Luis sostiene que centrar la atención solo en la conducta de los motociclistas equivale a culpar a las víctimas y deja de lado la falta de transporte público seguro, infraestructura adecuada y políticas de movilidad efectivas.
Villa Gutiérrez aseguró que la incidencia de siniestros en motocicleta ha ido en aumento, sobre todo en colonias donde jóvenes utilizan las unidades para realizar maniobras riesgosas.
“Muchas veces el padre llega de trabajar, le presta la moto al hijo y este sale a hacer piruetas en la calle. Ahí hemos tenido que intervenir a través de los comités vecinales que denuncian estas prácticas”, señaló.
El funcionario explicó que el Reglamento de Tránsito obliga al uso de cascos certificados bajo la Norma Oficial Mexicana, pero se ha detectado que muchos motociclistas emplean cascos de bicicleta o de electricista.
“Ese tipo de cascos no ofrece ninguna protección en caso de accidente. Desde que una persona se sube a la moto, aunque solo vaya a tres cuadras, debe portar casco adecuado, tanto conductor como acompañante”, afirmó.
En cuanto a las vialidades de mayor riesgo, indicó que la avenida Salvador Nava es la más transitada, pero los incidentes registrados ahí son más frecuentes con vehículos que con motocicletas, gracias a la aplicación estricta de la restricción que obliga a motos menores de 450 centímetros cúbicos a circular por las laterales.
“Lo que más se observa es que la gente ya está tomando conciencia. Cada vez hay menos infracciones por no usar casco, pero aún falta avanzar”, subrayó.
Frente a esta narrativa, Pedaleando San Luis lanzó una postura crítica.
“Ya vimos a la autoridad poniendo toda la responsabilidad en los conductores de motocicletas, como si el sistema que lo permite no existiera. Sí, las cifras son alarmantes y hay conductas temerarias, pero satanizar a quienes usan moto repite la lógica de culpar a las víctimas y borra las causas de fondo”, advirtió la organización.
El colectivo recordó que en la capital, según datos obtenidos por transparencia, entre enero y el 19 de agosto de 2025 ocurrieron 1 mil 429 siniestros viales, de los cuales 306 involucraron a motociclistas, es decir, uno de cada cinco accidentes (21.4%).
“Esto refleja la alta exposición y el riesgo al que se enfrentan diariamente quienes dependen de la moto para trabajar o estudiar”, señalaron.
Para Pedaleando San Luis, la motocicleta se ha convertido en una alternativa obligada, no en una elección libre.
“No hay transporte público accesible, seguro ni eficiente; las calles no ofrecen condiciones para caminar o pedalear de manera segura; y no todas las personas pueden adquirir un automóvil. Ante ese escenario, miles de familias dependen de la moto. Mientras no existan políticas para desincentivar su uso, la prioridad debe ser proteger a quienes la utilizan”, subrayaron.
La agrupación también criticó las deficiencias en la información oficial, ya que ninguno de los siniestros está georreferenciado. Por ello, propusieron la creación de una Dirección de Movilidad en la capital que permita identificar zonas de riesgo, planificar intervenciones y aplicar políticas basadas en evidencia.
“Ninguna muerte ni lesión en las calles es aceptable. La seguridad debe diseñarse desde el entorno, no solo desde la prudencia individual. Necesitamos calles seguras, infraestructura segura, transporte público eficiente y controles efectivos de velocidad. Mientras no haya ese sistema seguro, los motociclistas seguirán expuestos y responsabilizarlos solo a ellos es injusto”, concluyó Pedaleando San Luis.