María Ruiz
La capital enfrenta una creciente tensión vial provocada por el estacionamiento desordenado de taxis en zonas de alta afluencia, lo que ha derivado en múltiples incidentes de tránsito y fricciones entre operadores de transporte público.
La Dirección de Tránsito y Vialidad ha identificado focos críticos donde la falta de regulación afecta la movilidad urbana y la seguridad de los usuarios.
Uno de los puntos más conflictivos es la Central Camionera TTP, ubicada sobre la carretera 57, a la altura de Rutilo Torres, donde recientemente una unidad de transporte chocó con varios taxis estacionados en doble fila.
“Este tipo de siniestros se repite, porque no hay una regulación clara de los espacios de ascenso y descenso”, señaló Armando Puente Puente, titular de Tránsito.
La Alameda también ha sido escenario de aglomeraciones de taxis que comparten parada con camiones urbanos, lo que genera disputas entre choferes y confusión entre los pasajeros.
“Se amontonan en zonas que no están diseñadas para eso, y terminan bloqueando el flujo de vehículos y personas”, agregó Puente.
Aunque la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) es la instancia responsable de regular estos espacios, desde Tránsito se insiste en la necesidad de una coordinación más efectiva.
“Ustedes tienen la capacidad de regular estas zonas de estacionamiento de taxis. Necesitamos que se definan lugares adecuados que no provoquen tanto conflicto”, expresó el funcionario.
Puente reconoció que ha habido acercamientos con la SCT, especialmente cuando se instalaron dispositivos de control en zonas conflictivas, pero lamentó que no se haya atendido plenamente la recomendación técnica de su dependencia.
“Se les dio la opinión sobre el mejor lugar, pero no hubo el eco que hubiéramos querido”, dijo.
La Dirección de Tránsito reiteró que sin una estrategia conjunta entre autoridades y gremios de transporte, los conflictos seguirán escalando hasta afectar la convivencia vial y exponer a la ciudadanía a riesgos innecesarios.