Arochi cuestiona instalación de antros en Carranza tras balaceras recientes

María Ruiz

Tras los eventos violentos ocurrido s en centro nocturnos de la capital potosina la última semana, Alberto Narváez Arochi, integrante del Corredor Cultural Carranza, señaló que este tipo de incidentes evidencia los riesgos de instalar centros nocturnos en la avenida más importante de la capital.

El empresario, opinó en específico de eventos como el acontecido la noche del miércoles 24 de septiembre en el antro Glitter, ubicado sobre la avenida Carranza, cuando se registró una balacera que dejó consternados a vecinos y visitantes: el segundo incidente se registró la noche del domingo pasado en un bar de la colonia Lomas del Tecnológico, donde un cliente a bordo de una camioneta disparó en varias ocasiones dentro del lugar antes de huir, generando alarma entre asistentes y vecinos.

“Acaba de pasar allá en la avenida Carranza… pareciera que no sirven de todo para evitar situaciones de delito. Ese tipo de delitos no son previsibles, pero si estuvieran en un área con seguridad reforzada sería más seguro”, comentó Arochi.

El empresario también cuestionó que no existan estudios que respalden la apertura de más antros en la zona, por lo que calificó la iniciativa como “inválida” y perjudicial para la dinámica de la avenida.

“Alguien se lo ocurrió, alguien comentó que era buena idea, pero es muy mala idea. Es inviable poner más antros en Carranza”, puntualizó.

Arochi enfatizó que la avenida debe privilegiar la cultura, la educación y el arte, además de fomentar una vida nocturna sana que fortalezca el espíritu y contribuya a reducir la violencia. Asimismo, destacó la necesidad de acelerar la reconversión del corredor histórico al mejorar el alumbrado, la movilidad y dar apoyos fiscales para recuperar su vitalidad.

“Cada vez que se profundiza el daño, retomar la avenida va a ser más contracorriente. Hay que apostar por la cultura y la vida nocturna sana, no por la violencia”, concluyó.

Este llamado se produce poco más de un mes después de que el alcalde Enrique Galindo Ceballos anunciara la nueva ubicación de la zona de antros en la ciudad, una medida que ahora enfrenta cuestionamientos tras los recientes hechos violentos.