Desiree Madrid
En una jornada marcada por la inconformidad y la exigencia de diálogo, estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) marcharon la mañana de este viernes desde la calle Tomás Estévez hasta el Edificio Central, en la calle Morelos.
Con consignas como “¡Somos estudiantes, no porros!”, reclamaron ser escuchados directamente por el rector Alejandro Zermeño Guerra, a quien finalmente lograron entregar su nuevo pliego petitorio tras varias horas de espera.
La movilización fue pacífica y buscó dejar claro el deslinde de las y los alumnos frente a los hechos violentos ocurridos días atrás en el mismo edificio.
“Nosotros no somos parte de esos grupos, somos estudiantes que exigimos respeto y seguridad”, señaló una de las voceras.
Además de agradecer la presencia de los medios, enfatizó que los verdaderos universitarios siempre se han conducido de forma pacífica.
Durante la protesta, los estudiantes reiteraron su desconocimiento hacia la Federación Universitaria Potosina (FUP), los consejeros alumnos y la sociedad de alumnos de la facultad, a quienes acusaron de no representar al estudiantado y de haber sido omisos ante los hechos del 17 de octubre.
Según los manifestantes, ni los protocolos de seguridad se activaron ni hubo comunicación oportuna con la comunidad, lo que llevó a que se enteraran de lo ocurrido hasta días después.
El movimiento surgió tras una reunión fallida con sus representantes, quienes al pedir silencio a los inconformes, abandonaron el diálogo. Desde entonces, la relación entre los estudiantes y sus órganos de representación quedó fracturada.
El nuevo pliego petitorio, discutido y votado por alrededor de 300 estudiantes de Derecho y Criminología, incluye demandas centradas en la seguridad universitaria y en el reconocimiento de la voz estudiantil sin intermediarios.
Aunque al principio se les negó el acceso al Edificio Central, finalmente fueron recibidos por la abogada general Urenda Queletzú Navarro Sánchez, la contralora universitaria, Karla Francisca Pantoja Banda; la titular de Servicios Escolares, Ana Luisa González Sánchez; y el coordinador de Seguridad, Antonio Garza Nieto, quienes les solicitaron identificarse con su credencial o kardex para ingresar.
Más tarde, el rector Alejandro Zermeño acudió al patio del edificio, donde escuchó directamente las demandas del grupo de estudiantes.
Ahí, los jóvenes insistieron en que su objetivo no es la confrontación, sino que se atiendan las carencias en materia de seguridad, las fallas en cámaras de vigilancia y la falta de control del personal que resguarda las instalaciones.
La manifestación concluyó con ese diálogo abierto en el patio central. Los estudiantes consideraron positivo haber sido escuchados, pero el paro continuará hasta que existan respuestas concretas a sus exigencias.
“No buscamos promesas, queremos soluciones”, dijo una de las voceras al cierre del encuentro.





