Fernanda Durán
La Defensoría de los Derechos Universitarios (DDU) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) informó que ya se abrió una carpeta de investigación por la agresión denunciada por una estudiante con discapacidad motriz en la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, y que se implementaron medidas institucionales para evitar la interacción entre la alumna y la profesora implicada.
De acuerdo con la encargada de despacho de la DDU, Olivia Salazar Flores, el organismo tuvo conocimiento del caso el mismo día en que la joven difundió su denuncia a través de redes sociales, y posteriormente recibió la queja formal mediante el sistema electrónico universitario.
“Ese mismo día también recibimos la solicitud formal de la estudiante para integrar una carpeta de investigación”.
La funcionaria detalló que ya se han sostenido reuniones con ambas partes. La profesora señalada acudió a las oficinas de la Defensoría para exponer su versión de los hechos, mientras que el equipo de la DDU realiza actualmente una etapa de esclarecimiento, en la que se recopilan testimonios y elementos que permitan determinar responsabilidades.
Como parte de las acciones inmediatas, la facultad determinó medidas precautorias para proteger los derechos de las personas involucradas, entre ellas la restricción de contacto entre la docente y la alumna, con el fin de garantizar un entorno seguro durante el desarrollo de las investigaciones.
Salazar Flores explicó que no se han recibido otras quejas formales relacionadas con este caso o con la misma profesora, aunque la Defensoría analiza si el hecho puede implicar discriminación en razón de discapacidad, al tratarse de una agresión física y simbólica hacia una estudiante en situación de vulnerabilidad.
Asimismo, confirmó que personal del organismo ha estado presente en la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades desde el lunes, luego de que los alumnos colocaran nuevas pancartas para señalar casos de acoso y violencia.
“Tomamos fotografías de los letreros para analizar si tienen relación con carpetas ya integradas y también recibimos una nueva denuncia”.
Esta nueva queja no involucra a un profesor, sino a un integrante del personal administrativo de otra entidad universitaria, presuntamente por conductas de hostigamiento visual hacia estudiantes, conocidas como “miradas lascivas”.
La DDU mantiene presencia en el plantel y aseguró que continuará con la atención y acompañamiento a las víctimas, así como con la verificación de los señalamientos adicionales surgidos en torno a la violencia de género y la discriminación dentro del campus.





