Texto y fotografías de Fernanda Durán
A menos de 24 horas de que el Consejo Directivo Universitario sesione para votar la nueva Dirección de la Facultad de Derecho “Abogado Ponciano Arriaga Leija” de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), el conflicto interno escaló nuevamente.
La noche del miércoles comenzó a circular una convocatoria estudiantil para una marcha este viernes por la mañana, en demanda de un proceso “apartidista, transparente y respetuoso de la igualdad sustantiva”, en medio de cuestionamientos crecientes sobre la terna integrada por Luz María Lastras Martínez, Jesús Javier Delgado Sam y Georgina González Cázares.
La mañana de este jueves, un grupo de diez estudiantes acudió al Edificio Central —donde sesiona el Consejo Directivo Universitario— con pancartas que reclamaban la legitimidad del proceso. Entre los mensajes se leía: “Su terna con paridad es mera simulación patriarcal” y “Queremos una directora con convicción”.
En su posicionamiento, las y los estudiantes señalaron que el proceso estuvo marcado por opacidad y exclusión.
“Alzamos la voz frente a la falta de transparencia, las irregularidades y la simulación que una vez más marcaron los llamados procesos democráticos”, dijeron al iniciar su pronunciamiento.

Afirmaron también que el proceso “se construyó a espaldas del estudiantado”, y cuestionaron la legitimidad de una elección universitaria que “desoye, ridiculiza o minimiza las demandas urgentes de quienes habitamos los salones, los pasillos y los espacios donde la violencia se normaliza”.
Las y los estudiantes denunciaron además que la perspectiva de género incluida en el proceso fue apenas un gesto formal.
“Una caricatura de perspectiva de género que sólo reproduce la misma estructura patriarcal que decidimos combatir”.
Reiteraron su exigencia de que la Dirección sea ocupada por una persona con trayectoria en derechos humanos, feminismo y docencia. Además de condenar la violencia política contra profesoras que participaron en el proceso.
“Nosotras sí les creemos, sí reconocemos su trayectoria y exigimos que los espacios universitarios dejen de replicar lógicas excluyentes y punitivas contra las mujeres que se atreven a participar y disputar el poder”.

En el pronunciamiento se advirtió que rechazarán cualquier intento de inhibir la movilización.
“No aceptaremos represión, hostigamiento ni vigilancia contra el movimiento estudiantil”, y continuarán organizadas “hasta que la Facultad de Derecho sea un espacio digno, democrático y libre de violencia”.
Durante la marcha, otro grupo de estudiantes colocó impresiones con presuntas razones por las cuales ciertas personas no habrían pasado a la terna: falta de documentos, incumplimiento de requisitos de antigüedad docente o supuestas denuncias.
Una de las hojas señalaba una “denuncia penal” contra una profesora, pero fue intervenida por otras personas que escribieron la palabra “falso” sobre el mensaje.
La difusión de estas impresiones profundizó la disputa interna sobre el proceso entre grupos estudiantiles, docentes y simpatizantes de las distintas candidaturas.

La protesta estudiantil se inscribe en un proceso extraordinario abierto tras la renuncia de Germán Pedroza Gaitán, cuya salida detonó una crisis institucional que abarcó denuncias de violencia académica, reclamos por la seguridad universitaria y cuestionamientos al funcionamiento de los órganos colegiados.
Pese a las solicitudes de que la sesión del Consejo Técnico fuera pública y se incorporaran criterios de igualdad sustantiva en la conformación de la terna, el órgano optó por una deliberación cerrada que concluyó con los tres nombres enviados al Consejo Directivo Universitario.
La votación final ocurre en un ambiente de presión inédita para la Facultad de Derecho: con marchas estudiantiles, denuncias de violencia de género al interior del proceso y una comunidad dividida sobre la legitimidad del mecanismo que decidirá quién ocupará la Dirección durante el resto del periodo 2024–2028.
Actualmente, el Consejo Directivo se encuentra en receso debido a las dudas de sus integrantes respecto a las decisiones del Consejo Técnico Consultivo con la terna.





