Estela Ambriz Delgado
Las Morras Ecologistas, Naturalistas, Senderistas y Aventureras llevaron a cabo este 29 de noviembre el séptimo Ecosábado en el Área Natural Protegida (ANP) Parque Camino a la Presa, con pláticas sobre un proyecto de remediación de la presa San José y la implementación del baño seco como una alternativa sostenible de gestión de desechos humanos.
Grupo LEMUR, del Instituto Potosino de Investigación, Ciencia y Tecnología (IPICYT), inició con una charla sobre un proyecto en el que han trabajado para solucionar las diversas problemáticas en torno a la contaminación con lirio acuático en la presa.
LEMUR es un Laboratorio Extra Muros creado en 2020 que busca generar una liga más directa entre la incidencia social y la investigación para tener comunicación directa con las problemáticas, por lo que en el caso de la presa San José se hizo uso de la transdisciplina y diversos acercamientos con los actores involucrados.
Llevaron a cabo un mapeo de los sectores involucrados, tuvieron reuniones con gobierno, asociaciones civiles, patronato, otros académicos interesados en resolver el problema, y usaron metodologías de análisis cuantitativo para conocer los ejes de acción y qué es lo que conforma el problema.
Indicaron que la problemática implica desde la situación de las comunidades y fraccionamientos aledaños, que descargan su agua residual, así como deficiencias en la estructura de la presa y el tratamiento institucional que se ha dado, es decir, varios problemas entrelazados.
Asimismo, se puntualizó que la proliferación del lirio acuático trae consigo muchos problemas como el exceso de nutrientes, que a final del tiempo de vida se azolva y reduce la capacidad de carga de la presa, contamina, quita el oxígeno disuelto y con ello provoca la muerte de los animales.
Lo que propone LEMUR son varios ejes de acción: de entrada, una alianza multisectorial en la que no únicamente esté la academia, sino también asociaciones civiles, gobierno y población en general para que todas la necesidades e intereses y todo el conocimiento que se tiene sobre esta situación se tome en cuenta.
Como parte del trabajo preliminar, realizaron un mapeo o cartografía participativa con las comunidades aledañas para conocer la historia socio ambiental del hecho; desde cuándo están esas comunidades, los problemas que tienen, la condición actual de sus drenajes y escorrentías, para conocer la historia del sistema.
Además, llevaron a cabo reuniones multisectoriales en las que se han tratado de buscar soluciones no sólo del lirio sino a nivel sistémico, para que también se resuelva la condición de infraestructura de las comunidades que no tienen drenaje y la planta de tratamiento que no funciona regularmente.
Entre otras observaciones destacaron que la infraestructura de la presa no es la adecuada, pues hay un problema en las laderas que hace que lleguen más contaminantes, que impactan en la condición del vaso captador, por lo que proponen una alianza donde todos los sectores trabajen en conjunto.
Para concluir, indicaron que las propuestas de soluciones basadas en el análisis participativo se revisan a nivel legislativo en el Congreso del Estado, y se encuentran a la espera de una resolución, para saber si el gobierno invertirá en ello.
Por otra parte, el colectivo Nopalia dio la plática Baño seco para la salud ecosistémica y corporal, en la que se explicó el gasto de agua y energía que se requiere para el uso del baño o WC común.
En este sentido, se hizo mención de que el agua que usa la población se extrae de los mantos acuíferos subterráneos, cuya administración está a cargo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y organismos operadores, y requiere el uso de energía para su distribución.
Para el uso del baño, además del agua por la red de abastecimiento, requiere una salida de drenaje, administrada también por Interapas, para lo que se necesita otra energía extra para bombear hasta donde corresponde y se necesitan entre 12 y 20 litros de agua por cada descarga.
Nopalia explicó que toda el agua residual se va a la Planta de Tratamiento Tanque Tenorio, donde se le da un proceso de tratamiento para lo cual se usa energía que lleve esta corriente de agua, sumado al gasto del bombeo de las aguas residuales y en la limpieza de estas. Sin embargo, alrededor de la planta y de toda la ciudad se pueden ver lagos de aguas negras que son los desechos de la población.
Al respecto se subrayó que, como es un exceso de drenaje ante la insuficiencia de las plantas de tratamiento o la planeación para el manejo de estos residuos, se quedan en lagos alrededor de toda la ciudad, lo que provoca riesgos de enfermedades. Por ello este método no es saludable para el ecosistema ni para el cuerpo, pues además genera riesgos de infección.
Se puntualizó que el drenaje se ha vendido como pulcritud y un buen manejo de residuos, pero no es así porque queda rebasado y también es insuficiente el tratamiento que se da.
Asimismo, se abordaron las ventajas que frente a esto tiene el baño seco, que separa la orina de las heces fecales, las cuales son cubiertas con paja, aserrín, hojas, o idealmente una mezcla de materia orgánica seca con lo ya mencionado, tierra, y cenizas, a fin de crear una composta, que tras un proceso de un año puede ser usada en la tierra para plantaciones diversas a los alimentos.
La jornada inició desde las 10 de la mañana, con una caminata ligera por el parque, avistamiento y registro de aves, así como las actividades permanentes de picnic comunitario, ecoludoteca para niñas y niños, y limpieza de la zona.



