Por Antonio González Vázquez
Los nueve ejecutados del sábado en la capital del estado y en Soledad de Graciano Sánchez, confirman a esas municipalidades como las más inseguras y mortales del estado. De esos nueve crímenes, cinco fueron en Soledad y cuatro en la capital.
Ni el ayuntamiento de San Luis Potosí ni tampoco el de Soledad, ambos de filiación gallardista, dijeron algo sobre las atrocidades ocurridas donde se supone, gobiernan.
De los diez homicidios reportados por la Procuraduría General de Justicia del 1 al 7 de enero, siete se cometieron en la capital y Soledad.
Ahora, en unas horas del sábado, se cometieron nueve asesinatos, lo que implica que del 1 al 13 de enero hubo 16 homicidios en la zona metropolitana. Esa es la estadística, lo cual no implica que puedan ser más. La Procuraduría no siempre informa.
Por cierto, los alcaldes son Ricardo Gallardo Juárez que aún no decide su reelección en la capital o va por un escaño del Senado de la República, mientras que Gilberto Hernández Villafuerte irá por una diputación federal.
En México, la alta ineficiencia en el servicio público suele premiarse con candidaturas e impunidad. En los casos de San Luis y Soledad no podía ser la excepción.
Los municipios gallardistas en la primera catorcena de enero mantienen inalterable su promedio de asesinatos: siete de cada diez ejecuciones, se cometen en Soledad y San Luis.
Esto por supuesto, no preocupa a sus alcaldes. Lo que a ellos les es atractivo, grandioso y genial es entregar todo su infinito apoyo a los más desposeídos y desamparados.
Y claro, del Gobierno del Estado poco hay que decir. Peregrinamente creyeron que con la Fuerza Metropolitana todo retornaría a la paz. Ya han confirmado una y otra vez que no ha sido así.
Su Fuerza Metropolitana de Policía es un fracaso.
Y del Gobierno Federal ni se diga. Si alguien los ha visto por ahí, que les avisen que en lo que va del año, van más ejecutados que días transcurridos.
Además, en la Secretaría de Gobernación andaban más ocupados en la despedida de Miguel Ángel Osorio Chong que en la seguridad de los mexicanos.
Y del nuevo secretario de Seguridad Pública, pues nada, solo que sigue dando penas. Tras el episodio sabatino de los nueve homicidios, incluido el sexto feminicidio en dos semanas, la Secretaría apenas atinó a emitir un comunicado de prensa en el que aseguran que andan ya en la búsqueda de los criminales que sembraron el terror el sábado 13.
Esto dice la SSPE:
La Secretaria de Seguridad Pública del Estado (SSPE) en coordinación con fuerzas Federales, Estatales y Municipales de Seguridad, redobló esfuerzos y desplegó de inmediato un operativo en busca de los responsables de los hechos delictivos ocurridos ayer en la zona metropolitana.
Por instrucciones del Ejecutivo del Estado, las instancias de seguridad relacionadas, así como el Centro de Comando, Control, Comunicación y Computo (C4), trabajan arduamente sobre varias pistas aportadas por la SSPE.
Además se ha intensificado la vigilancia y prevención por parte de los elementos de la Fuerza Estatal Metropolitana, pertenecientes a la Dirección General de Seguridad Pública del Estado (DGSPE), quienes realizan labores de rastreo vía terrestre y aérea, y se espera el apoyo decidido de las demás corporaciones municipales.
Los tres niveles de gobierno trabajan de manera coordinada junto con la PGJE que ya ha identificado a las víctimas y encabeza las averiguaciones previas.
La SSPE exhorta a la ciudadanía a colaborar en las investigaciones proporcionando información sobre los hechos a través del 089 línea de denuncia anónima.
Ante reacciones como esta, es indudable que solo queda espacio para la zozobra y el desaliento; el panorama no podría ser más sombrío.