Por Antonio González Vázquez
El ayuntamiento de San Luis Potosí dió a conocer en un boletín de prensa, declaraciones de Jacobo Payán, quien confiesa que él apoya con patrocinio el Festival de la Cantera y aseguró que hay más empresarios que ayudan con su patrocinio. No estaría mal que cada uno de esos empresarios diga públicamente de qué monto es su apoyo.
En su portal electrónico, el gobierno de Ricardo Gallardo intentó salir a responder las dudas que se tienen acerca del origen de los recursos que se utilizan para financiar la celebración a la cantera.
Para ello, el ayuntamiento utilizó a Payán Latuff dado que la autoridad ha sido incapaz de dar a conocer los nombres de los presuntos patrocinadores y del dinero que cada uno habría aportado, se supone, voluntaria y desinteresadamente.
La información ofrecida por Astrolabio Diario Digital a partir de la respuesta del gobierno municipal a diversas solicitudes de información, refleja que el ayuntamiento carece de voluntad para transparentar el dudoso financiamiento del festival.
El empresario que siempre ha soñado en llegar a ser presidente municipal no interino, habría dicho según el ayuntamiento, que “son muchos los empresarios que están tomando parte activa en este evento aportando cada quien una parte del patrocinio”.
Y agrega que sobre el financiamiento privado, precisó “nosotros colaboramos dando un patrocinio, nosotros ayudamos para que no empiecen a decir que de dónde sacan la lana, somos varios empresarios los que apoyamos para la realización de eventos como este que sirve de desfogue para la población y además se activa la economía local”.
Lo que no dice en el comunicado, es con cuánto aporta al festival ni dice tampoco a cambio de qué se muestra con tanta filantropía.
Cuando Payán dice “nosotros colaboramos” debería aclarar quienes son “nosotros” pues de lo contrario, surgen más sospechas de que detrás del presunto apoyo existan acuerdos que deriven en afectaciones a la sociedad.
“Estos festivales son un desfogue para la gente, en muchas ocasiones con lo que tienen pues no completan para pagar el boleto de un espectáculo de la categoría que está presentando el gobierno de Ricardo Gallardo Juárez, es un gran acierto de su parte, pensar en la gente y en gestionar apoyo de la iniciativa privada”, dijo también Payán.
La pretensa explicación del empresario es sólo retórica, en el fondo se trata de una intención de defensa que no lleva a nada, lo que importaría en todo caso, es que se hable con la verdad.
La comparativa con lo que gastó Ciudad Valles con un festival similar es contundente, fueron más de 16 millones de pesos.
El costo de 8 millones 700 mil pesos está muy lejos de ser el gasto real, y como bien se precisa en la información de Victoriano Martínez, en la edición 2016 del festival, tan sólo en publicidad se gastaron seis millones de pesos.
Es notorio el despliegue de publicidad y propaganda que se ha observado esta vez desde antes y ahora en el desarrollo del espectáculo. Pagar una plana de publicidad en El Universal no es nada barato, lo que supone que en la administración municipal en lo que menos se piensa es cuánto cuesta.
