Por Antonio González Vázquez
Los Informes Finales de las cuentas públicas de Gobierno del Estado, Supremo Tribunal de Justicia y del Congreso del Estado fueron rechazadas por la Comisión de Vigilancia lo que obliga a que la Auditoría Superior del Estado reponga el procedimiento de auditoría.
Al desmoronarse credibilidad y confiabilidad en la Auditoría Superior del Estado por el caso de la corrupción entre diputados y coordinadores de la ASE para la limpieza de cuentas públicas, lo normal era no solo el rechazo a los informes de las cuentas públicas de los tres Poderes del Estado, sino también la reposición a las auditorías de los 58 ayuntamientos del estado.
Eso era no solo lo deseable sino también lo más obvio en esta mar de estulticia que ha emergido tras el escándalo de Enrique Flores – a quien chamaquearon con un video en el que confesó el modus operandi de la depuración de cuentas públicas – que bien visto, es quien ha abierto la caja de Pandora.
Los 58 informes de las cuentas públicas municipales, avalados por la desecha Comisión de Vigilancia que presidía José Guadalupe Torres Sánchez deberían ser también rechazados por el pleno toda vez que es el origen de la corrupción.
La causa principal para reponer las auditorías es por ejemplo, el increíble caso del ayuntamiento de San Luis Potosí que tiene cero observaciones financieras. Ni un solo centavo de los 2 mil 440 millones de pesos ejercidos por Ricardo Gallardo Juárez en 2016 fue objetado por la ASE.
Habida cuenta de que se han venido publicando noticias acerca de cómo se limpiaban las cuentas con Oscar Bautista como comandante en jefe junto con el ex mesero Reinhardt, no sería del todo descabellado pensar que en el proceso de auditoría si se anotaron observaciones financieras y luego, en los altos niveles de la ASE, las borraron.
De hecho, los informes de los 113 entes auditables están bajo sospecha y por tanto tendría que volverse a auditar a todos.
En razón de eso, de que las medidas tomadas hasta el momento desde el Congreso y la ASE no van más allá de la simulación, es que este jueves cientos de ciudadanos y empresarios acudirán a la sesión ordinaria para hacer notar a los diputados que no están ya para engañar a nadie.
El frente de ciudadanos y empresarios que hace unos días publicaron un desplegado para reprobar la corrupción legislativa, publica este miércoles un nuevo posicionamiento en el que le advierten a los diputados que la crisis de credibilidad ha tocado a todas las instituciones públicas y por tanto, se requiere de medidas urgentes para recobrar la confianza perdida.
Este jueves entonces, los diputados tendrán auditorio lleno y seguramente no les lanzarán piropos ni les festejarán ni les harán loas ni les ofrecerán aplausos, es muy probable que les digan sus verdades una tras otra y eso implica que no les va a ir nada bien.
Lo que piden en su desplegado los ciudadanos y empresarios es: no a la impunidad para los responsables de la red de corrupción Congreso-Auditoría. Sí a las medidas necesarias para evitar que la faciliten. Por lo tanto, exigimos la eliminación total del fuero en el estado.
También que ante el descrédito de las auditorías a las cuentas públicas por la corrupción excepcional, nueva revisión excepcional porque hoy carecen de credibilidad.
Y también, integración de los órganos fundamentales del Sistema Estatal Anticorrupción a propuesta de los organismos empresariales y de la sociedad civil, con blindaje para evitar que los nombramientos del Fiscal General, del Fiscal Anticorrupción y el Auditor Superior del Estado sean cuotas partidistas o atiendan al interés de personas o grupos políticos.
