En Xilitla, el ex gobernador Horacio Sánchez Unzueta se puso a hablar y opinar de la ola de violencia que asola a San Luis Potosí desde hace mucho tiempo y que, en la actual administración de Juan Manuel Carreras, se ha agudizado.
Es una obviedad que no le podría dar patadas al pesebre por lo que Sánchez Unzueta se cuidó de poner a salvo de cualquier responsabilidad al doctor Carreras.
La idea del ex gobernador era la de criticar y evidenciar a un solo funcionario de entre todos los que integran el gabinete de seguridad, así que se lanzó contra el secretario de Seguridad, Arturo Gutiérrez.
Responsabilizó al ex militar de la crisis de inseguridad al afirmar, que los resultados son muy desfavorables.
San Luis Potosí no es en estos momentos un estado seguro y punto, sentenció Sánchez Unzueta quien, en todo caso, no está descubriendo el agua tibia, sino que simplemente ha dicho lo que es evidente.
Lo deseable es que el ex gobernador debería solicitar una entrevista con el gobernador del estado para que le exprese de manera personal sus inquietudes “como simple ciudadano” en materia de seguridad.
Recuérdese que el ex gobernador es especialista en criticar al gobierno en tratándose de seguridad pública dado que en su momento, junto con otros ex gobernadores, le publicó una carta abierta al entonces gobernador Marcelo de los Santos para reclamar por la paz y tranquilidad perdidas.
Parece que Sánchez Unzueta erró el camino y utilizó al periódico Pulso para que en una nota informativa se dijera lo que él piensa de la inseguridad, quizá Sánchez Unzueta debió reunir a los ex gobernadores aun vivos para publicar una nueva carta y en ella reclamarle al gobernador del hecho de que San Luis sea tan inseguro.
Que le envíe una carta “como simple ciudadano” a Carreras, que le exija una reunión para hablar de la seguridad puesto que es un desastre, eso fue lo que afirmó en el gobierno de Marcelo de los Santos cuando el priísta se postuló defensor de la seguridad de los potosinos.
Siempre que Sánchez Unzueta urde algo, recurre a la prensa y ante la cercanía del proceso electoral 2018, el ex gobernador ha de pensar que se merece un puesto de mayor jerarquía que ese fantasmal del centro histórico.
De que San Luis es inseguro, lo es y de eso nadie lo duda, lo reprobable es que el ex gobernador utilice el tema para intentar una jubilación dorada en algún escaño o curul.