Por: Jorge Luis Rodríguez.
En la de por si complicada vialidad en la Avenida Fray Diego de la Magdalena o salida a Zacatecas, comerciantes invaden las aceras, dejando al peatón sin espacio para transitar de manera segura.
Esa arteria vehicular tiene permanentemente un flujo, pues es la salida a Zacatecas y es el único acceso a las nuevas colonias y fraccionamientos de la zona norte de la ciudad.
El tránsito de autos, unidades del servicio foráneo y urbano de transporte público, de carga, son muy frecuentes en la zona y sumados a la frecuente celebración de fiestas y verbenas religiosas en la Parroquia del Saucito, el peaton queda a la deriva y en un riesgo constante ya que las banquetas son invadidas con puestos ambulantes y extensiones de los locales.
Esta situación es y ha sido ignorada sistemáticamente por las autoridades municipales. Hay carnicerías que aparte de invadir la banqueta y ocupar parte de las calles para la carga y descarga, colocan toldos en los que cocinan fritangas, con lo que exponen a transeúntes y clientes a un accidente.
Resulta ya cotidiano que el peatón debe bajar de la banqueta por la obstrucción de las aceras, exponiéndose a ser arrollados por ciclistas o automovilistas.
En esa misa área, las banquetas que circundan al templo del Saucito tienen también desde hace algunos años una cerca de madera, como si se estuviera haciendo algún trabajo especial, sin embargo no se ven trabajadores.
La asociación “Del Saucito para el Mundo” sistemáticamente se han quejado no sólo ante la dirección de comercio capitalino sino también han hecho presión a través de redes sociales, sin embargo tampoco han tenido eco en sus demandas.
