Fernanda Durán
El Congreso del Estado concluyó este domingo 29 de junio el segundo periodo ordinario de sesiones con un acumulado de 273 iniciativas y 88 puntos de acuerdo registrados, de los cuales una proporción significativa permanece sin resolución.
De acuerdo con el cotejo legislativo publicado en la Gaceta Parlamentaria Dos y la suma de los dictámenes resueltos en este fin de semana, al menos 157 iniciativas continúan pendientes de análisis, dictamen o votación, lo que representa el 57.5 por ciento del total.
En contraste, solo 89 fueron consideradas procedentes, mientras que otras 21 se clasificaron como improcedentes, sin materia o atendidas; se reportaron cuatro iniciativas desechadas, una dada de baja y una más con desistimiento voluntario, lo cual significa que prácticamente seis de cada diez iniciativas no han sido dictaminadas ni votadas.
Esto cuestiona la eficiencia del trabajo en comisiones, la calendarización de asuntos, y la capacidad del Congreso para atender su propia carga legislativa.
En cuanto a los puntos de acuerdo, el reporte y la sumatoria del domingo da cuenta de 39 asuntos pendientes, equivalentes al 44.3 por ciento; otros 42 fueron considerados procedentes, mientras que el resto incluye dos casos de caducidad declarada, tres desistimientos y dos clasificados como improcedentes, sin materia, archivados o dados de baja.
Aunque el Congreso llevó a cabo reformas en diversas materias durante el periodo, el balance final indica una alta proporción de asuntos no dictaminados.
De acuerdo con lo previsto, el tercer periodo ordinario iniciará en los próximos meses y retomará los asuntos rezagados, además de recibir nuevas propuestas. Por ahora, el reporte al cierre del segundo periodo refleja que más de la mitad de las iniciativas y una parte sustancial de los puntos de acuerdo siguen sin resolverse, pese a haber sido enlistados en tiempo ordinario.
Aunque las y los diputados aseguraron que con el incremento de 20 a 27 comisiones legislativas en esta nueva administración se disminuiría el rezago, la carga de trabajo se mantiene en niveles similares a los registrados por la legislatura antecesora en el mismo periodo.
Al respecto, el diputado presidente de la Directiva, Cuauhtli Fernando Badillo Moreno, atribuyó el volumen de asuntos pendientes en parte a la obligatoriedad de realizar consultas ciudadanas.
Señaló que “muchos de esos temas están sujetos a consultas, muchos tienen impacto presupuestal”, lo que ha impedido su avance legislativo; además de que el Congreso está “esperando el recurso para poder ejecutar estas consultas”, que abarcan temas de movilidad, educación inclusiva y discapacidad.
En cuanto al número de iniciativas ciudadanas que permanecen pendientes, el legislador admitió no tener un dato preciso, aunque realizará un análisis para conocer el porcentaje que representan.
Destacó que este periodo legislativo ha estado marcado por una mayor participación de la ciudadanía y organizaciones que han presentado propuestas formales. Entre ellas se encuentra una iniciativa entregada por una cámara empresarial que será objeto de foros y asambleas legislativas.
Cuestionado sobre los recursos que solicitarán para las consultas, aseguró que los ocho millones de pesos requeridos se utilizarían para ejecutar entre cuatro y seis consultas prioritarias, como las relacionadas con pueblos indígenas, discapacidad, educación inclusiva, movilidad, salud mental y autismo.
Insistió que el Congreso ya está técnicamente preparado para realizarlas y que “operativamente estamos listos para llevarlas a cabo cuando tengamos el recurso”.
Finalmente, confirmó que se contemplan al menos dos o tres periodos extraordinarios antes del 15 de septiembre; uno de ellos enfocado en la nueva Ley Orgánica del Poder Judicial. Con ello presumió que el Congreso no detiene sus actividades tras el cierre del periodo ordinario, pues continúan los trabajos en comisiones y el seguimiento de los proyectos en trámite.