Estela Ambriz Delgado
Si bien los ríos de temporal como el Paisanos, al norte de la ciudad, y el Calabacillas en Mexquitic de Carmona, son menos preciados por la cantidad y frecuencia de su afluente, al formar parte del sistema de recarga del acuífero, su contaminación con aguas residuales resulta altamente riesgosa, porque esta permea de manera directa en la tierra hasta los mantos freáticos.
Como lo explica el secretario del Consejo Hídrico Estatal (CHE), Edgar Piña Hernández, todos los ríos son parte del sistema de recarga del acuífero local, y lo hacen porque el agua sigue su camino natural, y aunque un río o un arroyo de temporal esté seco, también forma parte de este sistema.
Puntualizó que en el caso de los ríos Paisanos y Calabacillas, que la gente desprecia porque no llevan agua permanentemente, en realidad hay más riesgo de contaminación e infiltración al acuífero, de esas aguas negras que descargan hacia los mantos freáticos porque están en contacto un poco más directo.
“Son parte de ese sistema que recarga de manera natural, por eso no es bueno que se contaminen y los utilicen como drenajes, aparte de eso se supone que, por normativa, todos los fraccionamientos deberían tener autorizaciones de descarga por parte de Interapas, y en teoría no debería de permitir las descargas a arroyos de temporal tampoco, no únicamente a cuerpos perennes”.
El doctor en Arquitectura Sustentable señaló que en todo caso, esos fraccionamientos deberían de tener sus plantas tratadoras, vender las casas con bio digestores, o con sistemas que se hagan cargo del tratamiento de las aguas residuales, ya que al no hacerlo se ahorran grandes cantidades de dinero.
“Entonces termina siendo un sistema mediante el cual los fraccionadores se ahorran una lana porque no tienen que invertir en las plantas tratadoras que son costosas, ni tampoco pagan los derechos de descarga que corresponden a Interapas, por lo que también es una fuga de recurso del organismo operador”.
En el caso del Paisanos, señaló que hay diversas irregularidades en el tema de la municipalización de fraccionamientos porque se supone esto conlleva también contar con autorizaciones, tanto de factibilidad de suministro de agua potable como la parte de las descargas.
Apuntó que esto es parte de un problema en San Luis Potosí, pues se detecta que de todos los fraccionamientos que existen, alrededor de 50 por ciento tienen algún tipo de estatus de irregularidad en relación al agua, ya sea descargas o suministro.
“Eso nos habla de una práctica histórica omisa por parte de las autoridades, principalmente Interapas, respecto a los fraccionadores por la cuestión de que es un ente que se maneja de manera muy politizada, y cada que entra un nuevo gobierno coloca a su gente eso les permite un control discrecional al interior del organismo, principalmente para la cuestión inmobiliaria”.