Por: Jorge Luis Rodríguez.
Aun y cuando autoridades federales y locales han afirmado que la Seguridad Social no se privatizará, en el IMSS tienen cuatro meses sin surtir insulina a sus derechohabientes.
Esther Moreno Chevez es derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social, padece diabetes desde hace algunos años y con ello su salud se ha deteriorado notablemente, pues ha sido candidata a diálisis, que con tratamientos alternativos ha frenado estos procedimientos; su vista ha disminuido, y por considerar a la diabetes una enfermedad crónica, es consultada mensualmente en la clínica 49, ubicada en el fraccionamiento San Leonel de esta Ciudad.
Ahora es viuda y recibe una pensión mensual no mayor a los dos mil pesos mensuales, producto de un derecho obtenido por su marido por sus más de treinta años de cotizaciones al IMSS.
La Señora Esther depende de dos dosis diarias de insulina mix 25 para mantener bajo control su enfermedad, sin embargo el IMSS no ha surtido sus prescripciones médicas desde hace cuatro meses, por lo que ha tenido que adquirirlas por su cuenta; pero esta compra resulta muy onerosa e injusta, debido a que su marido trabajó más de treinta años para contar con una seguridad social efectiva que cubriera las necesidades de sus dependientes al ya no estar presente.
Esther Moreno informó que al buscar que le surtan sus recetas en la farmacia de la clínica 49, simplemente le dicen que no hay en existencia y no la remiten a otras farmacias del IMSS, dejándola en el limbo.
Al averiguar el costo de este fármaco en diversas farmacias de la Ciudad, encontramos que la presentación de 10 mililitros va de los 933 a los 769 pesos y la de cartuchos de los 560 a los 450 pesos.
La presentación del frasco de 10 mililitros le sería suficiente únicamente para una semana, lo que le significa un gasto de 3 mil 80 pesos mensuales, que con los mil 500 que recibe de pensión, podría comprar la mitad de la dosis indicada por su médico, dejando de lado los gastos corrientes de su hogar como son cuentas de servicios y alimentación.
Si bien es cierto que el IMSS y el ISSSTE no se privatizarán, como se han cansado en repetir nuestras autoridades, pareciera que si buscan disminuir a sus derechohabientes pensionados.
