Fernanda Durán
Las próximas comparecencias de funcionarios estatales ante el Congreso del Estado como parte de la glosa del Cuarto Informe de Gobierno reavivaron el debate sobre la pertinencia y efectividad del formato actual, pues diputadas y diputados de distintas fuerzas políticas coincidieron en que el ejercicio debe transformarse para dejar de ser una mera formalidad y convertirse en un verdadero mecanismo de rendición de cuentas.
El diputado Marco Gama Basarte, de Movimiento Ciudadano, calificó el modelo vigente como “anacrónico” y alejado de las exigencias de transparencia que la ciudadanía demanda.
Consideró que las comparecencias deberían realizarse en el Pleno del Congreso, y no en un auditorio, para garantizar un debate abierto y de cara al público.
“El formato debe ser más eficiente, con mayor transparencia y debate parlamentario. No se trata de confrontar, sino de despejar ideas adecuadamente. Ojalá podamos transitar hacia un esquema donde todos los legisladores participen y rindan cuentas ante la ciudadanía”.
Gama adelantó que su representación parlamentaria insistirá en promover un nuevo modelo que obligue a la asistencia de todos los diputados y diputadas, y fomente la deliberación pública.
“Tiene que ser un formato que recupere el interés ciudadano y que cumpla con la responsabilidad institucional del Congreso”.
Por su parte, el coordinador de la bancada de Morena, Roberto García Castillo, confirmó que su grupo parlamentario analizará posibles cambios en los próximos ejercicios de glosa.
Indicó que uno de los objetivos es abrir espacios de participación ciudadana, de modo que la sociedad pueda expresar inquietudes que sirvan de base para los cuestionamientos legislativos.
“Queremos que sea más abierto, que la ciudadanía tenga oportunidad de manifestar sus posturas y que nosotros estemos pendientes de lo que nos hagan llegar para plantearlo el día de la comparecencia”, afirmó.
Sin embargo, la diputada morenista Gabriela López Torres matizó que aún no existe una propuesta formal, aunque el formato actual ha sido objeto de críticas.
“Algunos ciudadanos nos dicen: ‘¿para qué se felicitan entre todos? Mejor que hablen de lo que el informe arroja’. Creo que debemos sentar un precedente y revisar si el formato es el correcto o necesita adecuarse”, expresó.
De igual forma, el coordinador del PAN, Rubén Guajardo Barrera, exhortó a que las comparecencias no se reduzcan a actos de cortesía.
“Este ejercicio no debe convertirse en una pasarela o en una sesión de aplausos. Tenemos la obligación de cuestionar lo que se ha hecho o dejado de hacer en beneficio de la ciudadanía”, advirtió.
Guajardo señaló que los legisladores deben ser los principales auditores del Ejecutivo y que, de no asumir esa función, “estos ejercicios democráticos terminarán siendo una farsa”.
De acuerdo con el calendario aprobado por la Junta de Coordinación Política (Jucopo), las comparecencias se desarrollarán del 20 al 22 de octubre en el auditorio “Manuel Gómez Morín”, con la participación de los titulares de las principales secretarías estatales, entre ellas Gobierno, Finanzas, Educación, Salud y Seguridad.
Por su parte, el coordinador del PVEM, Héctor Serrano Cortés, defendió que el formato vigente se mantiene como resultado de acuerdos políticos dentro de la Jucopo, y que busca optimizar tiempos y centrar las discusiones en los temas más relevantes.
“A veces las preguntas ya traen implícita la respuesta. Lo importante es que los funcionarios sean exactos en sus aclaraciones. Hemos tenido reuniones previas para acotar los temas y que en las comparecencias sólo se aborden los puntos no resueltos”, explicó.
Serrano consideró que, más que cambiar el formato, se debe garantizar que las comparecencias sean objetivas y sustantivas, y que las y los diputados eviten convertirlas en escenarios de posicionamientos políticos.
Sociedad civil: “Son ejercicios caducos”
Desde la ciudadanía, el vocero de Ciudadanos Observando, Guadalupe González criticó el esquema actual, pues “ya no representan una verdadera rendición de cuentas”.
“La mayoría de los funcionarios va a tomarse fotos y los diputados terminan alabándolos. Si lo que informan no es verdad o no se cumplió, no pasa nada. No hay consecuencias”.
González insistió en que las comparecencias deben transformarse de fondo, no solo de forma, al establecer mecanismos de verificación y sanción ante información falsa o incumplida.
“Son formatos arcaicos que ya no obedecen a las circunstancias actuales”.
Mientras algunos legisladores apuestan por abrir los ejercicios al público y al debate parlamentario, otros defienden la eficacia del formato actual bajo acuerdos políticos, pero la mitad de los integrantes en la Jucopo coinciden en que el reto será lograr que las comparecencias dejen de ser una formalidad anual y se conviertan en un instrumento real de evaluación del gobierno estatal.