Por: Samuel Estrada.
El vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera lamentó el incremento de hechos delictivos de alto impacto durante las últimas tres semanas; y asimismo hizo hincapié en que el clero potosino no ha estado exento, ya que un sacerdote de una parroquia que se encuentra en una comunidad en los límites con Zacatecas, sufrió un “levantón” y estuvo secuestrado por varios días.
Recordó que las calles siguen siendo peligrosas y así como la ciudadanía, también los miembros de la iglesia lo han sufrido. “Hay personas que incluso han tomado la canasta de las limosnas y se han ido con ella, pero hay cosas más graves, como fue el caso de un párroco que nos contó que sufrió un “levantón” por parte de miembros del crimen organizado”.
Detalló que en lugares alejados y de poco tránsito esto lamentablemente pasa, dado que como le sucedió a este padre, pues veían que pasaba constantemente por un camino y los criminales pensaron que los estaba vigilando o que podía darse cuenta de ciertos movimientos y fue que lo amenazaron, lo golpearon, lo secuestraron y lo liberaron días después.
