Por Eduardo Delgado
“Que les sirva mucho a los damnificados”, expresa el joven al entregar los víveres que junto con un compañero llevó como donativo a la Cruz Roja y enseguida pregunta: “¿Qué más hace falta?”. Le informan que alimento para bebé y se lo comenta a su compañero antes de abordar su vehículo para retirarse.
Unas jovencitas, que llegaron por separado dispuestas a colaborar, preguntan: “¿En qué puedo ayudar?”. Se inscriben como voluntarios, reciben indicaciones y se ponen a embalar cajas con latas de frijol o bolsas de arroz.
“Los amamos hermanos”, escribió un niño sobre la parte superior de una lata de leche evaporada. “Dios y México está con ustedes”, se lee en una lata de sardinas. Sobre la cubierta de plástico de una de las latas de leche en polvo alguien mandó otro mensaje a los afectados: “Dios los bendiga”.
Es poco después del mediodía y poco después de que unos han llegado a donar víveres colocan una mesa en la acera para registrar a quienes llegan con ayuda.
Igual llegan personas en vehículos y a pie a dejar sus donativos. “¡Cadena!”, grita uno de los voluntarios para indicar el arribo de una camioneta con víveres. Jovencitas se pasan entre manos cajas de leche, agua, galletas y comida enlatada.
En el interior voluntarias colocan los donativos sobre una mesa para comenzar a separar y clasificar los productos. Un hombre adulto estaciona su coche para sacar de la cajuela una caja de cartón a punto de desfondarse.
Sobre el barandal de la Cruz Roja un voluntario coloca lonas con la información de los productos requeridos, como paquetes de enseres para bebes.
Empleados de una cadena de sala de cines que opera en plaza Sendero, bajan del coche de uno de ellos cajas de cartón embaladas y bolsas con diversos productos.
En el interior, las jovencitas embalan y con un plumón identifican en el exterior el contenido de cada caja de cartón con el símbolo de la Cruz Roja en uno de sus costados.
En la Unidad Administrativa Municipal es mayor la afluencia a la oficina de la Dirección General de Desarrollo Social que al centro de acopio instalado a un lado de esta.
En el sistema estatal para el Desarrollo Integral para la Familia hay algarabía mientras parte un tráiler cargado con víveres con destino a la ciudad de México. Enseguida, voluntarios forman vallas para subir diversos productos a otro camión.
