María Ruiz
El alcalde Enrique Galindo Ceballos reconoció que todavía entre un 25 y 30 por ciento de los comercios en la capital potosina operan en condición irregular, aunque hay avances significativos en los procesos de regularización durante su administración.
El edil explicó que su gobierno ha priorizado el control y la regulación sobre la recaudación, con el objetivo de ordenar la actividad comercial en la ciudad.
“Di una instrucción muy puntual: yo prefiero control sobre recaudación. No importa recaudar, importa controlar, importa regularizar”, afirmó Galindo.
El presidente municipal señaló que actualmente el número de establecimientos regularizados ya iguala al total registrado durante el trienio anterior, lo que atribuyó al trabajo coordinado entre la Dirección de Comercio y Protección Civil.
“Comercio ha igualado el número de comercios regulares parecido al de todo el trienio pasado. Eso habla de cómo hemos estado trabajando en ello”, comentó.
Galindo indicó que el Ayuntamiento se ha concentrado primero en apoyar al comercio formal, aquel que cumple con sus obligaciones y protege su inversión, aunque todavía hay negocios que no cuentan con licencia de funcionamiento.
“En San Luis no están acostumbrados a tener licencia de funcionamiento, y todos los negocios deben tener autorización de venta, de giro y de condiciones de operación. Es un tema de control”, añadió.
El alcalde también hizo referencia a los tianguis y bazares que operaban sin permisos municipales, en particular los que se instalaban en la zona del Parque de Morales.
Dijo que muchos de estos eventos se amparaban bajo pretextos de emprendimiento o de pertenecer a comunidades indígenas, pero en realidad funcionaban como espacios comerciales sin autorización.
“En Morales ya no hay tianguis porque detectamos que cobraban a los ofertantes sin tener permiso alguno. Cobraban hasta mil 900 pesos por local y se instalaban más de 120 puestos. Los invitamos al orden y estamos definiendo cómo podrán operar, pero debe ser dentro de la legalidad”, explicó.
Galindo Ceballos destacó que la flexibilización de trámites y la coordinación interinstitucional han permitido avanzar en la regularización, pero el reto principal sigue siendo cambiar la cultura del cumplimiento entre los comerciantes.
“Queremos que haya orden, que no se engañe a la gente y que todos los negocios trabajen dentro del marco legal”, concluyó.





