Fernanda Durán
El Fondo Monetario Internacional (FMI) sugirió al Banco de México (Banxico) nuevos aumentos en la tasa de interés debido a la inflación en 2023, e instó al Gobierno Federal a ampliar la agenda de políticas de oferta para lograr un crecimiento mayor y más incluyente, a pesar de que dieron su beneplácito al enfoque proactivo del Banxico.
En los resultados de la Consulta del Artículo IV para 2022 realizada por el organismo, donde evalúa la situación económica y perspectivas de cada uno de los países miembros del FMI, se consideraron prudentes las políticas macroeconómicas en México, pero recomendaron una serie de medidas ante la inflación.
“Los esfuerzos deben incluir medidas para abordar la corrupción y la delincuencia y fortalecer el Estado de derecho, aumentar la inversión en capital humano, solucionar los cuellos de botella en la infraestructura, reducir las rigideces de los mercados laboral y de bienes, y promover la profundización e inclusión financiera”, detalla el reporte.
Los directores ejecutivos encargados del análisis también advierten que “podrían ser necesarios nuevos aumentos de la tasa objetivo y el mantenimiento de una postura de política restrictiva durante algún tiempo”.
El FMI prevé que el PIB en México desacelere 1.2 por ciento en 2023, en comparación con un crecimiento de 2.1 por ciento esperado este año, por el crecimiento menor de Estado Unidos y las condiciones financieras globales.
Asimismo, los directores esperan que la inflación en el país pueda estabilizarse antes de la baja gradual estimada para el próximo año en el resto del mundo, pues opinan que México está bien posicionado para sortear los retos debido a la solidez de sus políticas macroeconómicas.
Sin embargo, aconsejaron reparar los planes de contingencia para tener una política económica rápida, por lo que “sería importante aumentar los amortiguadores fiscales en el corto plazo y reformar el marco institucional para lograr una mayor flexibilidad a largo plazo”.
“La suavización de los precios al menudeo de los combustibles, si bien redujo las presiones sobre los costos, tuvo un costo considerable en el presupuesto y, en general, exhortaron a las autoridades a que, en caso de que los precios del petróleo suban de nuevo, elijan apoyos más focalizados a fin de proteger otros gastos prioritarios”.
Finalmente, los especialistas señalaron la necesidad de adoptar medidas en favor del medio ambiente “para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El fomento de una mayor participación del sector privado en el sector energético ayudaría a impulsar la competitividad y la inversión”.
