María Ruiz
El alcalde Enrique Galindo Ceballos anunció este martes su interés en intervenir directamente en la reparación del acueducto de El Realito, infraestructura clave para el abasto de agua en la capital potosina, pero que actualmente opera de forma intermitente.
“Si el ducto yo lo arreglo, tendría a disposición de la ciudad 50 millones de metros cúbicos de agua”, subrayó el edil al lamentar que, pese a su importancia, el municipio no tiene control jurídico sobre la obra, ya que solo paga por el servicio.
Galindo Ceballos reconoció que las constantes fallas en El Realito han obligado al municipio a buscar fuentes alternas para garantizar el abasto. En ese sentido, se prevé la perforación de entre cuatro y cinco nuevos pozos, ya identificados, con el objetivo de reducir la dependencia de este acueducto que “a veces está y a veces no está”.
Además, el alcalde detalló que este año se contempla una inversión total de hasta 240 millones de pesos en obras hidráulicas para la ciudad a través de su Dirección Municipal del Agua.
Esta cifra incluye recursos federales, municipales y lo recaudado a través del pago del servicio que realiza el organismo operador Interapas.
Sobre Interapas, Galindo recordó que el organismo “vive de cobrar el recibo, no tiene ningún otro presupuesto”, por lo que su administración ha reforzado la inversión en comunidades que no dependen de este sistema como Escalerillas y Peñas, donde se han destinado entre 50 y 60 millones de pesos adicionales para atender las necesidades hídricas de más de 100 comunidades rurales.
El edil puntualizó que existen tres frentes principales de inversión en materia de agua: la reparación de daños urbanos como socavones —que en algunos casos han requerido obras de hasta 10 millones de pesos—, la creación de nueva infraestructura hidráulica, y la perforación de pozos para asegurar el suministro.
Finalmente, Galindo expresó su disposición para gestionar la reparación del acueducto de El Realito, a pesar de no tener una relación jurídica directa con la presa ni con el ducto.
“Es una pena, pero me gustaría invertir ahí, porque resolvería de fondo una parte del problema del agua en la ciudad”, concluyó.