Estela Ambriz Delgado
A pesar de que tanto el Interapas como el Ayuntamiento de la capital se habían comprometido a concluir en un máximo de entre 45 y 60 días, las obras necesarias para reconducir el agua residual que se vierte de manera cotidiana las 24 horas del día en el Río Paisanos no han sido concluidas y la contaminación persiste.
Los trabajos del plan de saneamiento de este cuerpo de agua iniciaron el pasado 22 de octubre y el compromiso inclusive fue reiterado días después por el alcalde Enrique Galindo Ceballos. Desde ese día la Dirección de Obras Públicas comenzó con el proceso de corte de la línea de conducción, hacia el pozo de visita donde se sacará el agua residual.
En su momento, el director del organismo, Jorge Daniel Hernández Delgadillo, dijo que la línea de conducción de 130 metros hacia el pozo de visita en la avenida Pánfilo Natera sería lo más problemático, pues implicaba trazado, escarbar e introducir el tubo mediante el que sacarán el agua residual, por lo que llevaría entre 40 y 45 días máximo. Sin embargo, esto concluyó apenas el pasado 20 de diciembre.
Además, se había proyectado realizar de manera simultánea el trabajo preventivo del primer cárcamo, mientras coordinaban la construcción del otro. Aunque de manera previa al arranque de las obras, si se rehabilitó medianamente el cárcamo de rebombeo existente, la labor quedó inconclusa.
No obstante que han pasado 71 días, desde que las autoridades hicieron el compromiso de dar una solución definitiva a este grave problema de contaminación, ya que desde hace más de 7 años diariamente se descargan aguas negras —que son responsabilidad de Interapas—en el cauce del río, en la colonia Villas del Sauzalito.
El día del arranque Hernández Delgadillo afirmó en entrevista que esta era la primera acción que Interapas hará, de manera conjunta con algunas otras instancias del ayuntamiento de la capital, como Obras Públicas, y Gestión Ecológica y Manejo de Residuos, última para trabajos de profilaxis o limpieza en la zona.
Atención por la exigencia ciudadana.
El interés del ayuntamiento y de Interapas por atender la problemática surge de la presión ciudadana, pues tras años de solicitarles se actúe al respecto, el 9 de octubre un grupo de vecinos de las inmediaciones del río realizó una manifestación simbólica e hizo entrega de una solicitud en las oficinas del organismo operador Interapas, para exigir la clausura de las descargas.
Esta acción fue respaldada por colectivos como Morras Ecologistas, Naturalistas, Senderistas y Aventureras, Pedaleando SLP, Derechos Urbanos, Lúminas centro de Derechos Humanos AC., Deconstructoras, Frente Nacional por las 40 horas comisión SLP, Valor y Fuerza AC., y Agua Libre.
Sin embargo la labor de rescate del río inició desde hace varios años, por parte de ciudadanos preocupados como Andrea Vega, quien ha denunciado ante diversas instancias, que desde hace aproximadamente 7 años se ha incrementado la contaminación de este cuerpo de agua temporal.}
En 2023 acudió ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la cual canalizó al ámbito estatal con la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam), que el 2 de junio de 2023 admitió la denuncia ciudadana, y solicitó el apoyo de la Comisión Estatal de Agua (CEA) y de Interapas para una inspección, finalmente determinando que la clausura le compete al organismo operador.
Sin embargo, cuando se realizaron dichas inspecciones, ni siquiera se llevaron muestras del agua para analizarlas, e Interapas no realizó la clausura. Las y los vecinos comentaron que, de manera extraoficial, los ingenieros que acudieron al sitio admitieron que la descarga es del mismo organismo operador.
A petición del mismo Interapas, en marzo de 2025 presentaron nuevamente la denuncia dirigida a José Daniel Hernández Delgadillo, pero hasta inicios del mes de octubre se presentaron a inspeccionar el sitio.
Las y los habitantes de Villas del Sauzalito consideran es un asunto que compete a toda la ciudadanía, debido a que es el único río vivo en San Luis Potosí, y es un espacio natural que cuenta con vegetación y fauna, y a quienes viven en sus alrededores por las afectaciones a su salud, pues temen que se convierta en un canal de aguas negras.
Consideran que al permitir estas descargas se están violentando sus derechos humanos, como el derecho a un medio ambiente sano, así como a la salud, pues representa un foco de infección.
