Antonio González Vázquez
La Comisión Estatal de Derechos Humanos y las aspirantes a ocupar la presidencia para el período 2021-2025, “no se merecen” pasar por la crisis en que fue a caer el proceso legislativo, criticó Alejandro García Alvarado, presidente interino de la CEDH, quien evaluó además, que si puede haber implicaciones contra la legislatura por violencia política de género.
En entrevista, cuestionado sobre si la Comisión esta al borde de una crisis institucional por la falta de acuerdos en el Congreso del Estado respecto de su obligación de elegir a la nueva presidenta del organismo, dijo que “somos respetuosos de la soberanía del legislativo, pero ya tienen que decidir quién va a presidir”.
El trabajo de la institución no se puede detener, “pero los integrantes del Consejo Ciudadano de la Comisión están muy preocupados de la situación; esperamos que el legislativo pueda determinar quien llevará las riendas del organismo”.
Indicó que en el caso de que “los mismos legisladores no llegasen a una determinación (a más tardar mañana), dependería de ellos cómo se va a tratar el que no lleguen a acuerdos, es decir, si llegan a aun acuerdo para ver quien estará al frente temporalmente de la presidencia”.
Confió en que no se llegue a ese punto, pues hay un caso precedente en el estado de Michoacán donde llevan más de un año sin presidente formal. “Ojala no llegemos a eso”.
García Alvarado, señaló que aun cuando no se llegue a elegir a la presidenta, la CEDH no entraría a una etapa crítica pues se mantiene el trabajo en las visitadurías, así como en las oficinas de la institución.
¿Cómo esperar del Congreso del Estado buena voluntad para resolver la elección cuando es visible la injerencia de intereses políticos y de partido?
“Bueno, esa es la percepción que se ha visto, sobre todo en los medios de comunicación,, ahora esperemos que los trabajos que hayan tenido al interior de las comisiones y de las bancadas, puedan tener los buenos oficios de que, que el mejor perfil o los mejores perfiles sean quienes puedan presidir el organismo”, subrayó.
Pese a lo desaseado el proceso que se ha seguido en el Congreso, el presidente interino de la CEDH, estimó que no dañan la imagen de la Comisión ni de la persona que llegue a ser electa.
Explicó que “hay una transición que han sufrido los organismos públicos de defensa de los derechos humanos y día con día, los titulares y los procesos para llegar a ser titular de algún organismo se vuelven más complejos; la misma ciudadanía, la sociedad civil organizada levanta más la voz señalando la exigencia de que las autoridades cumplan con sus funciones”.
En ese sentido, agregó, “los diputados tienen esa obligación de responderle a la ciudadanía logrando los acuerdos y nombrando a la presidenta”.
El proceso de elección, más que complejo ¿no le parece muy turbio?, se le preguntó y dijo que “la coyuntura política así lo hace parecer, pero al final del día, el mismo Congreso del Estado tendrá que sacar el proceso adelante”.
Acerca de la intervención de intereses políticos que son los que han detenido la elección, refirió que para elegir el mejor perfil sin guiarse por intereses políticos, “desde el principio los diputados tenían la obligación de estar informados y conocer los perfiles y contrastar, eso es ineludible, que puedan analizar sus perfiles y que en su momento determinen, pero en base a la información “.
El presidente interino lamentó que “una elección sin precedente que tiene que ver con las acciones afirmativas de los derechos de la mujer, no merece que se pueda estar retardando más; merecen que haya un trabajo de diálogo, un trabajo legislativo a efecto de que puedan ponerse de acuerdo para que la próxima titular del organismo llegue con la fortaleza con que debe de llegar”.
De si de lo sucedido hasta ahora se configura violencia política de género contra las aspirantes, precisó que “cada una de las personas que integramos la función pública somos responsables de nuestras decisiones y en ese sentido, las candidatas están en la posibilidad de tomar alguna acción”.
“Hay que analizar (si hay causales de violencia de género) desde la perspectiva de derechos humanos y pudiera haber, en efecto, algunas situaciones afirmativas”, agregó.
A unas horas de que concluya el plazo legal para elegir a la nueva presidenta de la CEDH, estimó que al día de hoy, lo ocurrido en el Congreso respecto de la CEDH, “deja muy mal sabor de boca”
