La CEGAIP pone ejemplo de opacidad con transparencia simulada

Por Victoriano Martínez

La vocación de opacidad que prevalece en la Comisión Estatal de Garantía de Acceso a la Información Pública (CEGAIP) es transparente y José Gerardo Navarro Alviso, su comisionado presidente, la exhibe al cumplir con la publicación de la información del gasto en viáticos en la Plataforma Estatal de Transparencia (PET), aunque sin entregar el informe sobre los resultados del viaje.

Es el típico ejemplo de la simulación en transparencia que se ha generalizado entre los 254 sujetos obligados de la administración pública del Estado a los que la CEGAIP da calificaciones altas de cumplimiento sólo porque publican archivos con los formatos correspondientes, pero cuyo contenido no atiende a la información que deben contener.

En el caso de los viáticos de la CEGAIP destacan dos viajes de Navarro Alviso a la Ciudad de México, acompañado por Omar Alejandro Velázquez Hernández, secretario técnico, en los que acudieron a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER) para “tratar asunto de Unión Europea”.

A la CEGAIP le alcanzó para reportar la fecha en la que se entregó el cheque de viáticos a Navarro Alviso y su acompañante (16 mil 405.30 pesos a cada uno en enero y otros 16 mil 405.30 pesos a cada uno en mayo), indicar los días que duraría el viaje (del 23 al 25 de enero y del 29 al 31 de mayo), pero no para cumplir con el “informe de la comisión o encargo encomendado”.

“Se informa que a la fecha de la publicación de la información en el artículo 84 fracción XIV, no se ha realizado la comprobación correspondiente de los viáticos”, señala el documento en Word que se abre al hipervínculo correspondiente al informe.

De los ocho viajes que aparecen en el formato de viáticos correspondiente al mes de agosto, sólo uno abre un informe sobre el viaje, y es de la comisionada Ana Cristina García Nales correspondiente a un viaje que realizó a Cartagena de Indias en Colombia para asistir al “Encuentro anual de la Red Iberoamericana de Protección de datos 2025”.

También es el único de los ocho viajes en el que se reporta el costo. Se habían asignado 29 mil 982.10 pesos y se reportan como erogados 24 mil 411.43 pesos y no erogados 5 mil 570.67 pesos. Para conocer el monto de los viáticos asignados al resto de los viajes es necesario rastrearlos en la lista de cheques que se publica en la PET.

Aunque el primer viaje de Navarro Alviso y su acompañante se dio en el mes de enero y el segundo en mayo, en el reporte de viáticos del mes de agosto en el apartado del informe sobre el resultado de las gestiones aparece la nota de que “no se ha realizado la comprobación”.

Una situación que el Manual de Procedimiento de Viáticos de la CEGAIP sanciona. “La entrega de los documentos de la comprobación se deberá efectuar en un término máximo de 5 (cinco) días naturales posteriores a la conclusión de la comisión”, dice el punto 7.6, en tanto que el 7.7 señala que “los viáticos que no sean comprobados en tiempo y forma deberán ser descontados del salario”.

¿Ya se les habrán descontado a Navarro Alviso y su acompañante los recursos que se les entregaron para esos viajes? Se les asignaron 63 mil 611.20 pesos para acudir a las reuniones con la Secretaría de Relaciones Exteriores para ver el “asunto” de la Unión Europea (UE).

Un asunto sobre el que Navarro Alviso no ha informado pero que, de acuerdo con los antecedentes de relaciones de la CEGAIP con la UE, podría tratarse del adeudo que la Comisión tiene con esa organización por incumplimientos con el programa ACERCATE.

La última información disponible sobre el caso se tuvo en 2022: el 22 de agosto la UE envió una notificación en la que le requería a la CEGAIP el pago de 31 mil 273.01 euros. “De no producirse el pago en el plazo indicado (15 días), la Comisión Europea iniciará, por todas las vías legales, el procedimiento de ejecución tanto por lo que se refiere al principal como a los intereses”, le advirtieron a la CEGAIP.

El 27 de septiembre de ese año, la CEGAIP solicitó una ampliación presupuestal a la Secretaría de Finanzas y luego de que no se la autorizó, intentó que en el presupuesto 2023 se incorporara la cantidad como si se tratara de un nuevo programa de promoción de la transparencia. Tampoco logró que se lo aportaran.

Desde entonces, en los informes públicos de la CEGAIP el reporte de ese adeudo desapareció, y en el Estado Analítico de la deuda sólo reportó “otros pasivos”, sin especificar su origen. Ese renglón de pasivo registra una variación permanente con abonos cada dos meses, entre los que destaca el correspondiente al mes de junio por un millón 40 mil 5 pesos.

La segunda reunión de Navarro Alviso en la SER se dio del 29 al 31 de mayo, por lo que es muy probable que la disminución de la deuda en más de un millón de pesos se deba a que finalmente se saldó el adeudo con la UE.

Pero como la CEGAIP prefiere la opacidad, sólo se puede especular que se pudo haber saldado esa deuda… y saber que aún debe, al mes de agosto, un millón 696 mil 646pesos, sin saber por qué.

Se trata del tipo de información que se oculta en la práctica de transparencia simulada que la CEGAIP no solo les tolera a los 254 sujetos obligados, sino que ella misma pone el ejemplo de lo que no debe ocurrir para que la población pueda hacer efectivo el derecho de acceso a la información pública.