“Lo que enseñamos hoy será obsoleto en cinco años”, advierte rector de la UASLP

Fernanda Durán

El rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Alejandro Zermeño Guerra, advirtió ante integrantes del Consejo Directivo Universitario que la educación superior enfrenta un reto urgente: adaptarse a la velocidad del cambio tecnológico y a la obsolescencia acelerada del conocimiento.

En sesión ordinaria celebrada este viernes, presentó un panorama crítico con base en presentación del Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines (CUPIA), de la Subsecretaría de Educación Superior, en el que se expone que “un estudiante con conocimientos que sale el día de hoy, en el 2025, para el 2030 está obsoleto el 50 por ciento de los conocimientos”.

Zermeño explicó que el consejo abordó temas rutinarios como jubilaciones, titulaciones y resoluciones de la Comisión de Justicia Universitaria, pero que el enfoque central de su mensaje fue la necesidad de transformar el modelo educativo.

“Tenemos que hacer procesos de microcredencializaciones más rápidas, más ágiles, en que te puedas estar actualizando en el área que tú seas”, sostuvo.

Planteó que la Universidad debe ampliar su oferta a cursos breves, flexibles y accesibles, especialmente para profesionales en activo.

“Voy a seguir trabajando, voy a seguir laborando, etcétera, pero los fines de semana me voy a meter a estos cursos para poderme estar actualizando”, ejemplificó al señalar que esto permitiría a un ingeniero en ejercicio adquirir habilidades en nanotecnología sin cursar una nueva licenciatura completa.

Reconoció que uno de los mayores retos será transformar la mentalidad docente.

“Lo primero que tenemos que hacer, que es lo más complejo, es hacer entender al profesorado que lo que yo di de clases hace 20 años ya no es actual”, enfatizó.

Además afirmó que muchos planes de estudio largos ya no responden a las necesidades actuales.

“Esas licenciaturas de cinco, seis, siete años ya son obsoletas. Ahorita tenemos que concentrar tu conocimiento en tres años y medio, cuatro, que te vayas a laborar y luego regreses a actualizarte”.

El rector insistió en que las universidades públicas se quedan atrás frente a instituciones privadas que ya operan bajo modelos más dinámicos.

“Nosotros, todas las públicas, somos todavía muy tradicionales. ¿Quieres estudiar conmigo? La clase es de 8:00 a 12:00, 4:00 a 6:00, de lunes a sábado. Y ellos te dicen: aquí está tu conexión, la puedes llevar el domingo en la madrugada, el sábado en la noche, el lunes en la tarde, lo que puedas”.

Advirtió que si no se incorpora la inteligencia artificial en todos los niveles universitarios, el rezago será inevitable.

“Hoy, en el puesto que estemos, cualquiera de nosotros, si no tenemos apoyo de la inteligencia artificial, nos estamos atacando”.

Zermeño no descartó que la UASLP migre eventualmente de un modelo semestral a uno cuatrimestral, como una vía para reducir tiempos de formación y aumentar la pertinencia, pero no será una decisión personal y será un proceso a largo plazo.

Aseguró que como primer paso se busca socializar esta visión en todas las facultades como ocurrió en la sesión y lo siguiente es que los integrantes del CDU lo bajen hacia los consejos técnicos y profesores.

De acuerdo con la presentación, en el panorama nacional la educación superior enfrenta desafíos estructurales que requieren transformaciones urgentes. La cobertura bruta apenas alcanza el 45.1 por ciento, lejos de la meta del 55 por ciento planteada en el Plan Nacional de Desarrollo 2025–2030.

Para lograrlo, sería necesario crear más de un millón de espacios nuevos, es decir, 170 mil cada año, lo que implicaría construir, de forma inviable bajo esquemas tradicionales, diez universidades de 17 mil estudiantes anualmente. A esto se suma la concentración de casi el 50 por ciento de la matrícula nacional en solo diez carreras, lo que evidencia una oferta educativa poco alineada con sectores estratégicos emergentes.

El sistema también arrastra asimetrías en el financiamiento federal y estatal, así como una descapitalización crítica de los fondos de pensiones universitarios, atribuida al aumento en la esperanza de vida, la falta de reservas y las aportaciones insuficientes.

En contraste, las tendencias globales apuntan hacia modelos más flexibles y tecnológicos como el avance acelerado de la inteligencia artificial, que en solo dos meses alcanzó niveles de adopción que a otras tecnologías les tomó décadas, obliga a impulsar la educación abierta y continua.

En este contexto, el Plan México propone desarrollar al menos 15 microcredenciales nacionales en áreas clave como transición energética, nearshoring, IA, salud mental, agroindustria y diseño digital, mediante cursos cortos y modulares que permitan a los profesionales mantenerse actualizados sin necesidad de cursar nuevas licenciaturas completas.