Por Victoriano Martínez
Para el gobernador Ricardo Gallardo Cardona cada vez se vuelven más irresistibles sus impulsos, por una parte, por describir una realidad que se ajuste a la imagen que desea proyectar aunque la desmientan los documentos oficiales y, por la otra, de realizar actos sin el más mínimo respeto a la legalidad… incluidos requisitos ambientales.
Cuando el 16 de junio, Gallardo Cardona anunció un programa de reforestación en la Sierra de San Miguelito con un millón de árboles sin dar un solo detalle sobre las características del proyecto, incluidas autorizaciones y estudios previos, lo hacía con la certeza de que sólo bastaba con que así lo determinara él como gobernador no sólo para anunciarlo, sino también para realizarlo.
Y la realidad se tenía que ajustar de tal manera a su ocurrente determinación, que Sonia Mendoza Díaz, titular de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (SEGAM), se guio por el impulso de complacer al mandatario con el affaire protagonizado al falsear los objetivos de una reunión con Angélica Montañez Rivera, representante de SEMARNAT en el Estado, que aseguró era preparatoria de la reforestación en el Área Natural Protegida (ANP).
En respuestas a solicitudes de información, tanto la propia SEGAM como la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) revelaron la inexistencia del programa al no contar con un solo documento para cubrir los requisitos técnicos del proyecto y las autorizaciones requeridas conforme al plan de manejo de la ANP.
Las respuestas de las dependencias de la SEMARNAT describieron además los requisitos que debe cumplir un programa de reforestación en la ANP Sierra de San Miguelito conforme a lo que establecen las leyes generales del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), de Desarrollo Forestal Sustentable (LGDFS), el Programa de Manejo del ANP “Sierra de San Miguelito” (DOF, 28/06/2022) y el Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales (en lo relativo a participación y consulta).
A pesar de no haber iniciado ningún trámite para cumplir con lo que establecen esas normas ambientales, Gallardo Cardona anunció que en los próximos días iniciarán la reforestación con árboles que afirmó que le compraron a la Secretaría de la Defensa Nacional.
“Ya nada más estamos en los últimos detalles de recibir todos los arbolitos, todo lo que se compró a Sedena. A Sedena le hemos comprado ya muchísimos árboles. Estamos ya en los últimos trámites para que nos entreguen todo lo que se compró y arranque la reforestación de la sierra. Eso ya es cuestión de días”, aseguró Gallardo Cardona.
El anuncio se da justo cuando se dio a conocer que las dependencias del sector de protección al medio ambiente, incluida la SEGAM, revelaron que no existen los trámites requeridos para poder realizar la forestación conforme las disposiciones que previenen que no se afecte la ANP, por ejemplo, con plantas que sean perjudiciales para el ecosistema de la ANP.
O a Gallardo Cardona no le importa violar dos leyes, el plan de manejo de la ANP y un convenio internacional, o acaba de realizar trámites exprés, que incluyen conocimiento y autorización federal, coordinación institucional con las instancias federales que informaron no haber recibido ningún trámite, evaluación de impacto ambiental, cumplimiento normativo: verificación de que el proyecto cumple con la normativa y aspectos geográficos y sociales, que incluyen georreferenciación de los sitios a intervenir y tomar en cuenta a las comunidades locales.
Este mismo martes, Gallardo Cardona incurrió en una más de sus negativas a lo que documentalmente está demostrado: “Nosotros compramos las pipas, no rentamos pipas. Todas nuestras pipas son propias; somos la única institución con pipas propias”, aseguró a de que, Astrolabio Diario Digital exhibió cinco contratos de arrendamiento de pipas.
Se trata de la respuesta que dio la Comisión Estatal del Agua a la solicitud de información 241229425000022 en la que se mencionan a tres proveedores con contratos que suman 10 millones 23 mil 840 pesos, y proporcionó 37 facturas por 7 millones 775 mil 108.99 pesos.
No son las primeras ocasiones en las que Gallardo Cardona incurre en estas prácticas ni serán las últimas, por lo que el mandatario podría parafrasear al ex gobernador Marcelo de los Santos Fraga: “se va a mentir cuanto se tenga que mentir” y “se va a pasar por encima de la ley cuanto se tenga que pasar”.