Fernanda Durán
De acuerdo con los resultados definitivos del Censo Económico 2024 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en San Luis Potosí operan 113 mil 597 unidades económicas del sector privado y paraestatal, de las cuales el 95.3 por ciento son microempresas, es decir, negocios que emplean a cinco personas o menos.
A pesar de ser mayoría, estas unidades solo concentran el 40 por ciento del personal ocupado y aportan 14 puntos porcentuales del valor agregado censal bruto, es decir, su impacto en la economía. En contraste, las empresas grandes, que representan apenas el 0.2 por ciento, concentran el 29.4 por ciento del empleo y generan 57 por ciento del valor económico estatal.
Además, el 59 por ciento de las unidades económicas fueron clasificadas como informales, con base en características como no pagar seguridad social, no usar servicios contables ni formar parte de corporativos; y aunque son numerosas, generan solo 2.7 por ciento del valor agregado censal y emplean al 19 por ciento del personal total.
El informe también señala que la inseguridad pública es el principal obstáculo que enfrentan las empresas en la entidad, señalada por el 38 por ciento de los establecimientos. Le siguen el alto costo de insumos (34%) y la baja demanda de productos o servicios (32%).
Por sectores, el 61.3 por ciento del valor agregado proviene de la industria manufacturera, seguido por el comercio (22.4%) y los servicios privados no financieros (10.4%). A nivel geográfico, el municipio de San Luis Potosí concentra el 53 por ciento del valor económico estatal, seguido por Villa de Reyes (30.7%) y Villa de Pozos (4.9%), que aparece por primera vez tras su creación como municipio.
El acceso al financiamiento aún es limitado. Solo el 12 por ciento de las microempresas reportaron contar con alguna fuente de financiamiento formal, frente al 27.6 por ciento de las pymes y el 34.7 por ciento de las grandes empresas. Las principales fuentes son bancos, cajas de ahorro popular y proveedores.
Finalmente, 31 mil 142 negocios en el estado reportaron uso de tecnologías digitales como plataformas de venta, almacenamiento en la nube o automatización, aunque la adopción sigue concentrada en medianas y grandes empresas.