Desiree Madrid
En distintos municipios de San Luis Potosí, los operativos desplegados durante la temporada decembrina para inhibir la venta de pirotecnia dejaron aseguramientos de material considerado ilegal o no autorizado, una práctica que persiste pese a las prohibiciones vigentes. En Villa Hidalgo, durante acciones del operativo denominado “Cohetón 2025”, autoridades detectaron un puesto de venta con diversos artefactos pirotécnicos cuya comercialización está restringida por el riesgo que implica para la población.
El decomiso fue resultado de un operativo coordinado entre la Guardia Civil Estatal, policías municipales y personal de Protección Civil, quienes realizaban recorridos preventivos en la cabecera municipal. Al identificar el punto de venta irregular, procedieron al aseguramiento inmediato del material, el cual quedó bajo resguardo de Protección Civil, mientras se reiteró a la población que el manejo, almacenamiento y venta de pirotecnia sin permisos representa un peligro latente, especialmente en contextos de alta movilidad y convivencia social.
Las acciones de vigilancia también se replicaron en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, donde el Sistema Municipal de Protección Civil informó el aseguramiento de aproximadamente 50 kilogramos de pirotecnia clasificada como de bajo riesgo. Los recorridos abarcaron diversos puntos de la demarcación, incluyendo la cabecera municipal, colonias como Cactus, La Sierra, San Felipe, San Antonio y comunidades como Enrique Estrada y Rancho Nuevo, evidenciando que la venta de estos productos continúa de manera dispersa.
De acuerdo con la información oficial, el operativo en Soledad se realizó en coordinación con la Guardia Civil Municipal y la Dirección de Comercio, a través de dos células que recorrieron el municipio en distintos horarios. Aunque parte del material decomisado fue catalogado como de baja peligrosidad, las autoridades señalaron que su comercialización está prohibida desde 2019, como una medida preventiva para evitar lesiones, incendios y afectaciones al bienestar animal y al entorno.
Durante los recorridos, además del aseguramiento del material, se emitieron recomendaciones preventivas a algunos comerciantes que argumentaron desconocer la prohibición. Sin embargo, las autoridades insistieron en que la normativa es clara y aplica para todo el municipio, por lo que cualquier punto de venta detectado será sujeto a retiro del producto y a las sanciones correspondientes.
En paralelo, a nivel estatal se puso en marcha el “Operativo Cohetón”, que contempla la participación de alrededor de 100 elementos de Protección Civil, en coordinación con corporaciones de seguridad y cuerpos de auxilio. Los recorridos se concentran en municipios con mayor afluencia y en zonas donde históricamente se registra la venta de pirotecnia, con el objetivo de reducir riesgos durante las celebraciones de fin de año.
Las autoridades estatales y municipales informaron que estos operativos continuarán hasta el cierre del año y los primeros días de enero, e hicieron un llamado a la ciudadanía para reportar puntos de venta clandestinos, tanto en espacios físicos como en redes sociales. Más allá del discurso preventivo, los decomisos evidencian que la comercialización de pirotecnia sigue siendo una práctica arraigada, pese a las restricciones y a los riesgos que cada año se repiten.





