Por: Diana López.
Hoy en día, cada vez es más complicado encontrar un trabajo estable, con buen sueldo y que además, sea agradable. No me digas que a esas horas cuando el “mal del puerco” te ataca y tu imaginación (si no te gana el sueño antes) se echa a volar, no te has imaginado y soñado con empleos donde sus objetivos sean cosas divertidas que pagarías por hacer. En el reportaje de Astrolabio del día de hoy, te dejamos una lista con más de un trabajo que seguramente estarías dispuesto a hacer.
Catador de helados.
¡Sí! Hay empresas de helados que contratan a gente para probar sus nuevos sabores y ver si puede gustar o no. Ben & Jerry’s por ejemplo, tienen a una persona catando los sabores nuevos de sus helados con una humilde cuchara de oro, ya que el oro no tiene sabor y de esta manera se puede apreciar el sabor del helado sin que la cuchara altere su sabor.
¡Oh, qué dulce empleo!
Probador de camas de lujo.
¿No te gusta madrugar para ir a trabajar? Pues bienvenido a este empleo, seguramente, encajarás a la perfección. Imagina tener qué dormir durante un mes para verificar que se descansa bien en esa cama. ¡Qué difícil!
Probador de toboganes de agua.
Tommy Lynch es el afortunado que posee este trabajo, viaja por todo el mundo probando toboganes de agua de parque acuáticos. Es todo… tirarse por el tobogán y analizar su velocidad, cantidad de agua e impacto con la piscina cuando termina.
Crítico de aire.
¿Qué demonios es eso? Bueno, si te gusta viajar, este es tu trabajo ideal. Tendrás que hacerlo a distintos lugares del planeta para probar los servicios de vuelo de la competencia. También existe el empleo para testear el servicio de luna de miel en hoteles con vistas al mar, servicio de lujo y todo tipo de comodidades. ¿Qué más quieres?
Catador de cerveza.
Mientras que millones de personas disfrutan de un buen vaso de una refrescante cerveza, hay personas con paladares exclusivos y muy sensibles que se dedican profesionalmente a catar distintos tipos de cerveza, y dan el visto bueno para que sean comercializadas. ¿Le entras?
Probador de videojuegos.
Muchos gastan su tiempo frente a la consola, pero si eres uno de ellos, envidia a los que hacen lo mismo y cobran por ello. En Estados Unidos y Japón, los afortunados “empleados”, juegan por horas probando videojuegos y ganan entre 30 mil y 40 mil dólares al año.
Escultor de Lego.
Si aún conservas tus fichas de la infancia, envidiarás a los afortunados escultores que trabajan construyendo modelos de Lego en los Legoland Discovery Centres que hay repartidos por todo el mundo. Pero tampoco creas que son miles… Sólo existen aproximadamente de 8 a 30 personas trabajando en esto.
Zombie profesional.
Si de pequeño te gustaba jugar bromas de susto, entérate: en Londres existe The London Bridge Experience y Londo Tombs, que son atracciones que contratan actores para disfrazarse de zombies y espantar a los turistas y visitantes del sitio. ¡Todo un disfrute!
Cuidador de islas.
De entre 35 mil aspirantes, Ben Shouthall fue el elegido para vivir en una paradisiaca isla, donde lo único que tuvo que hacer fue nadar en sus cristalinas aguas, explorar los aldededores y sobretodo relajarse y explicar su experiencia en un blog para promover el turismo de la isla, que se ubica en Australia. Su “arduo trabajo” duró 6 meses y recibió más de 75 mil dólares por ello.
Después de esto, sólo podemos decir: ¿A dónde mandamos nuestro currículum?
