María Ruiz
Aunque los bloqueos carreteros ejecutados por productores agrícolas se retiraron este martes, el sector empresarial señaló que las afectaciones ya dejaron huella en la movilidad de mercancías y en la operación de varias industrias.
Para Luis Gerardo Ortuño Díaz Infante, presidente de Coparmex San Luis Potosí, el episodio exhibió nuevamente la vulnerabilidad del país frente a conflictos que derivan de problemas no atendidos en el campo y en el transporte.
Ortuño subrayó que, a pesar de que la circulación fue restablecida, la interrupción temporal del flujo comercial generó retrasos que impactaron de inmediato a proveedores, cadenas de suministro y empresas que dependen de logística en tiempo real.
“Un día detenido basta para que toda la producción se desfase”, señaló al insistir en que el país no puede permitirse este tipo de parálisis, especialmente en un momento económico delicado.
El dirigente sostuvo que las autoridades federales siguen sin ofrecer soluciones de fondo a los reclamos acumulados de agricultores y transportistas, lo que terminó por detonar una presión que repercute en toda la economía.
Exhortó a que exista interlocución efectiva y atención urgente, pues de no hacerlo, estos episodios podrían repetirse y escalar.
