Carlos Rubio
Desde el pasado sábado 29 de agosto se instalaron módulos de recaudación de firmas en diferentes puntos de la capital de San Luis Potosí, con las que se busca que se lleve a cabo una Consulta Popular para decidir si se llevarán a juicio a ex presidentes como Carlos Salinas de Gortari (1988 – 1994), Felipe Calderón Hinojosa (2006 – 2012) y Enrique Peña Nieto (2012 – 2018) por presuntos actos de corrupción.
Desde antes de iniciar su mandato presidencial, Andrés Manuel López Obrador ha comentado sobre la necesidad de que los ex presidentes sean juzgados por los casos de corrupción por los que han sido señalados, no obstante, también ha dicho abiertamente que de llevarse a cabo una consulta, él votaría “en contra”, puesto que no quiere que se interprete como una “venganza política”.
¿Qué es una Consulta Popular?
La Consulta Popular es una herramienta que nunca se ha utilizado desde que fue aprobada –al menos no de manera formal y como lo estipula la ley–. Recordemos que el presidente ya ha realizado consultas con las que se determinó echar atrás las labores de construcción en el Nuevo Aeropuerto Internacional y darle el visto bueno al Tren Maya y a la refinería de Dos Bocas.
Según el artículo 5 de la Ley Federal de Consulta Popular, serán objeto de Consulta Popular los temas de trascendencia nacional. Además, para esta ley, para que los temas gocen de trascendencia nacional, deberán tener repercusión en la mayor parte del territorio y que impacten de manera significativa en la población.
¿Cómo se solicita una Consulta Popular?
El artículo 12 de esta ley otorga la posibilidad de que se realice una Consulta Popular, previa solicitud de: el presidente, el 33 por ciento de los integrantes de cualquiera de las Cámaras del Congreso o el dos por ciento de la lista nominal de electores.
Según el Instituto Nacional Electoral con corte al 27 de marzo de 2020, el total de ciudadanos que se encuentran inscritos al padrón y que cuentan con su credencial para votar vigente es de 90 millones 36 mil 367, es decir que, para llevar a cabo la Consulta Popular se necesitan recabar un millón 800 mil 727 firmas en todo el país.
Aunque se llegara a la meta, aún hay otro obstáculo que la solicitud debe enfrentar para ser válida y someterse a consulta el próximo año: la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN); esto se debe a que cuando la solicitud se lleva a cabo mediante el dos por ciento de la lista nominal de electores, la SCJN debe verificar su constitucionalidad del tema, además de revisar que la pregunta no sea tendenciosa o contenga juicios de valor.
En caso de que la SCJN determine inconstitucionalidad en la materia a consultar, se archivara el asunto y se dará por finalizado.
¿Quién está impulsando la consulta?
Al momento de acudir a firmar la pregunta que se lee es la siguiente: ¿Estás de acuerdo con que las autoridades correspondientes realicen una investigación sobre presuntos actos ilícitos que hayan causado afectaciones o daños graves al país realizados por los ex presidentes de México y, en su caso, se inicie un procedimiento judicial garantizando el debido proceso?
Quienes principalmente se están encargando de recabar firmas son los militantes del partido Morena, sin embargo, hay otras organizaciones que también se están encargando de realizar la labor en su respectivo estado y en realidad, cualquier persona es libre de hacerlo. Por ejemplo, en San Luis Potosí existe el movimiento llamado Juventudes 4T, con quienes Astrolabio Diario Digital tuvo la oportunidad de conversar al respecto:
Según Luis Julián Veloz, integrante del movimiento, con ellos colaboran personas que pertenecen a Morena, pero también quienes simplemente apoyan al presidente y esta vez decidieron organizarse para apoyarlo a él y a la 4T.
En la capital se han instalado diversos módulos para recabar firmas, no obstante, algunos de ellos no pertenecen al partido político, sino que son personas que por sí mismas decidieron organizarse para apoyar.
Por parte de Juventudes 4T, han instalado módulos en la Plaza de Armas, el Mercado República, la Calzada de Guadalupe, la casa de enlace de la diputada federal María Luisa Veloz Silva e incluso la Plaza de Soledad.
Aunque en el módulo instalado ayer por la tarde en Plaza de Armas no se observó una gran afluencia de gente, Luis Julián afirma que “hasta el momento va muy bien en todos los puntos (la recaudación de firmas), está yendo la gente a firmar; muchos hasta se llevan hojas para ellos ayudar a juntar firmas”.
En los módulos se solicita llevar la credencial de elector para que se tomen algunos datos de la parte trasera, firmar una hoja y plasmar una huella digital.
Un punto a considerar es que ni Morena ni ninguna organización aseguran la plena protección de los datos personales, para que estos no puedan ser utilizados con distintos fines a los comentados
“Al ser una consulta ciudadana sí entiendo que haya esa preocupación, la verdad es que yo no podría asegurar nada, porque en realidad al no tener institucionalidad nos avocamos a que todo lo hacemos con la buena fe”.
Luis Julián afirma que el 95 por ciento de las personas que se encuentran recabando firmas no pertenecen a Morena, sino que son “obradoristas” que dicen “denme hojas y yo afuera de mi casa pongo mi mesita”.
Según calcula el joven del movimiento Juventudes 4T, en San Luis Potosí se deben recabar alrededor de 52 mil firmas, además de que se tiene pensado a nivel nacional duplicar el número de firmas, en caso de que algunas de ellas resulten repetidas y no se contabilicen.
La fecha límite para recabar todas las firmas y presentarlas ante alguna de las Cámaras del Congreso es el 15 de septiembre.
