Prioritario, proteger el ambiente y mitigar daños por la construcción de nueva carretera a Matehuala

Estela Ambriz Delgado

Integrantes del comisariado ejidal de El Peyote manifiestan que más allá del beneficio económico del proyecto carretero Entronque 75 D Matehuala, concesionado a la empresa Infraestructura Potosina de Carreteras, lo que buscan es proteger el ecosistema de la región y que, en caso de realizarse, se mitiguen en mayor medida los impactos ambientales, por lo que pedirán apoyo a instancias federales para una propuesta con sustento agrario y ambiental.

En una reunión que sostuvieron ejidatarios de El Peyote, del municipio Guadalcázar, con el representante de la Procuraduría Agraria en el estado, Álvaro Pineda Maldonado, y personal del área jurídica del mismo, se expuso el caso y los acuerdos más recientes tomados en la asamblea del pasado 6 de junio, en los que se llegó al consenso de buscar una negociación sobre el precio de 400 pesos por metro cuadrado y bajarlo en función de que se aseguren obras prioritarias y la mitigación ambiental.

Al inicio de la reunión, Pineda Maldonado informó a los asistentes que se elaboraría una minuta de los temas a abordar, la cual se hará llegar al procurador agrario Víctor Suárez Carrera, junto con el acta de la asamblea que llevó el comisariado con los acuerdos tomados, a fin de que esté enterado de toda la situación previo a la reunión que sostendrán con él en próximos días en la Ciudad de México.

El colectivo Guardianes de la Sierra de San Miguelito, que acompañaba a los ejidatarios, indicó que esa próxima cita se tendrá en conjunto con personal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a propuesta del mismo procurador.

Se les solicitará que ayuden en la elaboración de una propuesta que tenga sustento agrario y ambiental, y que ellos mismos indiquen si está en posibilidades de hacerse como la negociación de pozos, reforestaciones, la mitigación ambiental y las obras que son posibles, es decir, un proyecto que realmente genere un beneficio a El Peyote, pues hay afectaciones e implicaciones importantes a futuro tras la construcción de una carretera, de las que la empresa nunca habla.

Indispensable se conozca y analice el contenido de la documentación

Asimismo, se señaló que este tipo de negocios en vías de comunicación —además de que son de grandes ganancias, la concesionaria se queda con la tierra y posteriormente el gobierno les paga—, conllevan la firma de múltiples contratos y convenios de los que nunca se les informa debidamente a los ejidatarios, se pasan directo a revisión de la P.A. para que los envíen al Registro Agrario Nacional (RAN), y sin haber sido analizados por los afectados.

Estos contratos, convenios, así como los estudios ambientales para tramitar el cambio de uso de suelo ante la Semarnat se incluyen hasta en 17 puntos del orden del día de una asamblea, como se pudo observar en el caso de la convocatoria para el pasado 27 de abril en el ejido La Tapona, que ya acordó la ocupación de sus tierras para este mismo trazo carretero.

“Hay análisis preventivos que se tienen que hacer antes, de flora y fauna, si hay un volumen de plantas y especies protegidas que se van a remover, que sí tienen que estar desde antes y no hasta que esté el impacto ambiental, pues hay una enorme cantidad de cactáceas por hectárea, e inclusive especies protegidas como el peyote”.

Por ello piden a la autoridad agraria y ambiental que toda esa documentación y esos estudios sean realizados y se entreguen a los ejidatarios para que expertos que los apoyan puedan analizarlos, pues los ejidatarios dejaron en claro que de manera prioritaria lo que se busca es que la obra no le haga daño al ejido, y si hubiera un impacto ambiental, le cueste a la empresa y den algo mejor de lo que ofrecen a otros ejidos.

Guardianes de la Sierra consideró que El Peyote puede dar la vuelta a la manera en que se tratan estos temas, y evitar que los hagan firmar volúmenes de contrato con todo salvoconducto para que la empresa pueda hacer lo que quiera.

“Por eso les sale tan barato, lo hacen rápido y les queda tan bonito, porque pasan por encima de las comunidades, aprovechando la falta de información, preparación y asesoría (…) tienen hasta un estilo muy marcado para convencer y envolver a la gente, y el aprovecharse de las pugnas internas por la representación siembran veneno para dividirlos”.

Las primeras afectaciones y los posibles impactos hídricos

El presidente del comisariado, Severo Rosales Medrano, informó que ya se han presentado las primeras afectaciones pese a que solamente se les autorizó hacer el trazo de la carretera: hicieron tres perforaciones de 20 metros de profundidad para el estudio de mecánica de suelo; una más quedó inconclusa en 17 metros, pues sorprendieron a los trabajadores con la maquinaria y les pidieron se retiraran, y planeaban realizar cinco más.

Además de que causaron otras averías en el tramo, hicieron brechas para meter la máquina, deforestaron, averiaron red de agua potable que es de PVC, y destruyeron aproximadamente 10 metros de un acueducto de mampostería usado antiguamente en la Ex Hacienda de Peotillos, por lo que formaba parte del patrimonio histórico del sitio, además de otros desperfectos en potreros y parcelas.

Por otra parte, Fidencio Cuarenta Alfaro manifestó su inquietud ante el hecho de que la construcción de esta vía pudiera causar afectaciones en el aspecto hídrico, que impacten en la actividad de agropecuaria, entre otras, pues se afectaría el agostadero al quedar dividido el ejido y el cauce del agua viene de donde pretenden hacerla.

El ejidatario indicó que es necesario que se analice el cauce del agua, porque podría ya no llegar al poblado y tendrían que ver con qué tipo de obra se pudiera compensar, como la construcción de una presa, además de la importancia de que se recuperen las especies de cactáceas protegidas, pues hay una vasta variedad a lo largo de donde se pretende hacer la carretera.

Por ello también en esta reunión con el representante de la P.A., en la que estuvo el presidente del Consejo Hídrico Estatal (CHE), Jonathan Abraham Quintero García, se acordó la colaboración de este organismo para realizar una exploración en el área y un estudio preventivo que pueda llevarse a la reunión que se tendrá con el procurador Suárez Carrera y el personal de la Semarnat, para que esta última y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) pudieran apoyar en un estudio a fondo de las escorrentías, para que se conozcan las implicaciones antes de que se construya, no hasta que ya se hubiera realizado.

Rescate y vigilancia de la diversidad de cactáceas

Por otra parte, el agroecólogo Pedro Nájera Quezada, quien se encontraba entre los asistentes, consideró que la intención de amortizar el impacto ambiental con otra obra puede ser inverosímil, porque la relación entre lo que pagarían y las afectaciones es nada.

Ante esta situación sugirió que se busque que la empresa dé parte de lo que invierte en otros procesos para compensar esto.

“Por ejemplo, en la parte del rescate de flora y fauna se pudiera trabajar con el ingeniero ambiental Daniel Guerrero como el técnico encargado (…). Podemos trabajar en conjunto para hacerlo con el ejido, en vez de que sea una empresa contratada como pro forestal u otra de greenwashing, que sean ustedes los que reciban los salarios por trabajo de campo, como Daniel que está capacitado y es de la comunidad, que reciba y sea el técnico encargado del rescate y vigilancia. Entonces el fondo que la empresa estaría destinando para esto sería para ustedes, es un trato un poco más amigable”.

Asimismo, advirtió que si bien pueden hacer una negociación para obtener un mejor pago que incluya obras y otros beneficios, deben tomar en cuenta que el impacto no solamente es hídrico, sino que llega a muchos otros aspectos, que se relacionan con el número de puentes que se harán, los pasos que les dejarán por debajo de la carretera, la distancia que van a tener que rodear para ir por el ganado y bajarlo al rastro, el número de puentes van a dejar por donde pueda caber un vehículo de cuatro toneladas para cargar a las reses.

Precisó que no nada más afectaría las corrientes superfluas y subterráneas de agua, pues esta cae en abanicos, se dispersa en el desierto, baja en arroyo, pero luego se abre en un delta, bañando toda la colina que es zona de pastizal, por lo que con la construcción de la carretera el agua se irá al arroyo y toda esa loma se va a secar por la falta de agua.

“Por más que quieran hacer algo no van a poder, esa agua se va a desviar a otros sitios, y todas esas lomitas hacia abajo —por donde pase la carretera— se van a secar, solamente el agua va a pasar por los arroyos entre cada loma, entonces toda esa capacidad de agostadero o de carga animal que pudieran tener, si de por si ya está mermada, se les va a ir todavía mucho más abajo, entonces también consideren eso”.

De igual forma, Nájera Quezada desmintió otro de los argumentos que la empresa usa para convencerlos: que tendrán la posibilidad de poner negocios en la carretera, lo que no será así dado que son privadas, y la estación de gasolina es de un amigo del dueño de la carretera y los negocios que tenga serán de grandes franquicias.

“Ustedes ni siquiera van a poder cruzar por esa carretera, que es lo que le pasa a los de Cerritos y Villa de Reyes, que la carretera no la pueden usar, es para otros y tienen conflicto por estar pasando en pequeños pedazos, además de que todavía y no se las han terminado de pagar incluso y sólo les dan largas con el apoyo de los gobiernos en turno”.

Por su parte, el secretario del comisariado, Eladio Cerda Guerrero, coincidió en que es muy importante se tome en cuenta la propuesta de Daniel Guerrero para mitigar los efectos que pueda ocasionar el proyecto carretero.

“Lo importante es como mitigar ese efecto, porque sabemos que si le ocasionamos más daños al medio ambiente, el cambio climático va a ir afectando más. Recordemos que la naturaleza, en ese afán de auto regularse, está ocasionando muchos cambios que afectan todo el equilibrio ecológico. Es muy importante que se tome en cuenta eso”.

El agroecólogo destacó que México es el país con mayor variedad de cactáceas, así como el estado de San Luis Potosí, y la región de Guadalcázar a Villa Hidalgo es conocida como hotspot, por lo que es importante la conservación de su diversidad, ya que muchas son especies únicas que solamente existen en esos valles, y por tanto es fundamental rescatarlas y crear un proyecto de reproducción para su conservación y su comercialización legal.

Guardianes de la Sierra indicó que eso es totalmente viable y será un tema que se trate en la próxima reunión con autoridades en la Ciudad de México, en este caso concretamente con el director de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Pedro Álvarez de Icaza, quien va a determinar lo que se puede hacer.

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