Desiree Madrid
La Secretaría de Educación de Gobierno del Estado de San Luis Potosí (SEGE) inició este lunes labores de limpieza y evaluación de daños en planteles educativos de la Huasteca Potosina, con el objetivo de reanudar clases presenciales de manera escalonada a partir de este martes 14 de octubre.
Las acciones se concentran en revisar la infraestructura escolar y garantizar condiciones seguras para estudiantes y personal docente después de varios días de lluvias intensas e inundaciones que afectaron a toda la región.
La suspensión de actividades impuesta por las lluvias torrenciales de los últimos días dejó sin clases a 145 mil 848 estudiantes de educación básica, según datos de la SEGE. Esta cifra corresponde al cierre del ciclo escolar 2024–2025 e incluye tanto planteles públicos como privados.
Además, 3 mil 071 escuelas permanecen temporalmente cerradas y 9 mil 451 docentes esperan indicaciones oficiales de Protección Civil para regresar a las aulas.
El regreso a clases no será generalizado. Las autoridades educativas aclararon que únicamente podrán reabrir los planteles que cuenten con condiciones mínimas de seguridad y servicios básicos. Brigadas técnicas verifican techos, instalaciones eléctricas, accesos y suministro de agua potable en escuelas de nivel básico, indígena, medio superior y superior.
La semana pasada, ante el desbordamiento de ríos y afectaciones en caminos, se suspendieron las clases en los 20 municipios de la Huasteca.
Las comunidades de Axtla de Terrazas y Tamazunchale fueron de las más afectadas por inundaciones, deslaves y daños en infraestructura pública, incluyendo planteles escolares que quedaron bajo el agua, como el CBTa de Jalpilla.
En varios municipios persisten problemas de acceso. Hay comunidades incomunicadas y tramos carreteros con paso intermitente, lo que podría retrasar el regreso a las aulas en algunas zonas.
“No todas las escuelas podrán abrir al mismo tiempo; será un retorno paulatino y cuidadoso”, señalaron autoridades educativas al confirmar que la reanudación dependerá de las condiciones de cada plantel.
En los puntos más afectados, personal de Protección Civil, ayuntamientos y brigadas escolares, continúan con labores de limpieza y retiro de escombros. También se realizan valoraciones estructurales para descartar riesgos en aulas, bardas perimetrales y techumbres. Algunos planteles podrían tardar varios días más en estar en condiciones de recibir nuevamente a la comunidad escolar.
Madres y padres de familia han sido llamados a mantenerse atentos a los avisos oficiales y a no enviar a sus hijas e hijos si las escuelas no han confirmado su reapertura. En comunidades con acceso limitado, las autoridades evalúan alternativas temporales, como clases en espacios comunitarios o aulas móviles, en caso de que la infraestructura escolar no se recupere de inmediato.
Aunque el retorno a clases comenzará este martes en algunos planteles, el monitoreo de daños continuará durante toda la semana. Protección Civil mantiene la alerta ante la posibilidad de nuevas lluvias, mientras comunidades afectadas trabajan en la recuperación de espacios públicos y viviendas.