Reforestación en la Sierra de San Miguelito despierta alarma por falta de coordinación

Foto: Guardianes de la Sierra

Desiree Madrid

La reciente declaración del gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona, sobre una reforestación masiva de la Sierra de San Miguelito con un millón de árboles, ha despertado una fuerte controversia entre autoridades federales, activistas y comunidades defensoras del territorio.

En medio del anuncio, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) desmintió públicamente que exista alguna coordinación con el Gobierno del Estado para llevar a cabo esa iniciativa.

A través de una aclaración difundida por la Oficina de Representación de la Semarnat en el estado, su titular Angélica Montañez Rivera informó que “actualmente no se tiene gestionado un programa de reforestación en conjunto con dicha dependencia estatal”.

Agregó además que el pasado 17 de junio se realizó una reunión con la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam), donde únicamente se discutieron dos temas: el helipuerto y el laboratorio de la UASLP.

“No se abordó el tema de la reforestación”, remarcó la dependencia federal.

El mismo posicionamiento se señala que toda reforestación en el Área Natural Protegida de la Sierra de San Miguelito debe realizarse “conforme al Plan Nacional de Reforestación 2025–2030, priorizando el uso de especies nativas y en estricto apego a los lineamientos establecidos en el Programa de Manejo del Área Natural Protegida de Flora y Fauna Sierra de San Miguelito, emitido por la Semarnat y publicado el 28 de junio de 2023”.

Ante esta falta de coordinación institucional, uno de los actores clave en la defensa de la Sierra, el colectivo Guardianes de la Sierra de San Miguelito, expuso su preocupación sobre las posibles implicaciones de un proyecto ejecutado sin respaldo técnico ni comunitario.

“Lo que nos parece verdaderamente lamentable es que por un lado los gobiernos hagan política, quieran generar una buena imagen, pero sin tener un sustento técnico ni real, y que se brinquen inclusive a la autoridad federal que es la competente”, enfatizó el activista Carlos Covarrubias.

Covarrubias recordó que la Segam ha sido omisa incluso cuando las comunidades han solicitado apoyo con árboles para reforestación.

“Hay solicitudes de árboles para los ejidos desde hace dos años y la Segam nunca ha dado respuesta positiva, entonces no se puede ir a hacer una simulación de colaboración y generar desinformación a la opinión pública, ese es el problema, no es un asunto menor”, sostuvo.

El ambientalista también evidenció que en 2022 la Semarnat propuso un convenio de colaboración al Gobierno del Estado, pero fue rechazado.

“Hay un convenio de colaboración que no se firmó en enero de 2022, que fue propuesto por la Semarnat al Gobierno del Estado, y que simple y sencillamente no se firmó porque no les interesa coordinarse. Ellos quieren hacer las cosas solos, y ahora resulta que lo que se está planteando es una acción coordinada, pero que ni siquiera la autoridad federal conoce”.

En su declaración, Covarrubias insistió en que el proyecto estatal parece improvisado, sin claridad sobre la procedencia o viabilidad de los árboles a plantar.

“Ni siquiera sabemos si tienen los árboles. Nosotros hemos estado plantando en promedio de 10 a 20 mil árboles por año, de especies nativas, con planes técnicos, con todo un trabajo previo con ejidatarios, con brigadas. ¿Cuáles son los árboles que van a meter?, ¿dónde están?, ¿quién los está produciendo?, ¿en qué vivero están?”, cuestionó.

También hizo referencia a experiencias previas en las que se introdujeron especies inadecuadas que no lograron sobrevivir en las condiciones del ecosistema.

“Se han estado sembrando especies que no son aptas para la sierra. Hay muchas experiencias en donde se han muerto miles de árboles por no conocer las condiciones del terreno”.

En cuanto a la motivación detrás de este anuncio gubernamental, el activista expresó dudas sobre su verdadero trasfondo.

“A mí me parece que la Sierra está siendo vista con un ojo no nada más ambiental, sino también económico. Entonces que los empresarios tengan cuidado porque ese tipo de actividades muchas veces son la antesala para justificar otro tipo de acciones”, advirtió.

Covarrubias anunció que el próximo martes 24 de se presentará públicamente un plan alternativo.

“Vamos a presentar nosotros el Plan de Reforestación 2025, elaborado por técnicos, por ejidatarios y por organizaciones. Será presentado el martes 24 de junio a las 5:30 pm en el jardín de San Miguelito”.

En ese mismo mensaje, hizo un llamado a las autoridades federales para que mantengan su postura y garanticen que no se rompan los lineamientos establecidos.

“Esperamos que la Semarnat asuma su papel, que exija que se respete el programa de manejo, y que no permita que esta serie de acciones que pueden parecer buenas, terminen por generar un daño a largo plazo”.

La Semarnat, en su boletín, recordó que sus acciones de reforestación han incluido “trabajos con diversas comunidades y ejidos, organizaciones como Guardianes de la Sierra de San Miguelito, en coordinación con la Conanp, Conafor, sociedad civil, Guardia Nacional y el director del Área Natural Protegida”.

Aseguró que todo ha sido realizado “con miles de ejemplares de flora nativa, contribuyendo a la restauración ecológica de este valioso ecosistema”.

Por último, la dependencia federal recalcó su compromiso con una política ecológica humanista, basada en criterios técnicos, ambientales y sociales:

“Reiteramos nuestro compromiso con una reforestación técnicamente sustentada, ambientalmente responsable y socialmente participativa, en congruencia con los objetivos de conservación de nuestra Sierra”.

Mientras tanto, el Gobierno del Estado no ha respondido directamente a los señalamientos y ha mantenido el discurso de un proyecto de gran escala para “revivir el pulmón verde” del estado.