Antonio González Vázquez
Enrique Francisco Galindo Ceballos ha desdeñado reiteradamente la invitación del Partido Acción Nacional (PAN) para afiliarse y desde ahí lance su candidatura a la gubernatura. Su ingratitud política hacia el blanquiazul es del tamaño de su arrogancia.
El pasado viernes, el alcalde capitalino electo en 2021 y reelecto en 2024, gracias a los votos de ese partido, le dio un portazo definitivo al blanquiazul.
En ambos comicios, el voto panista concentró más del 70 por ciento de la votación obtenida por la coalición PAN-PRI-PRD. Sin el PAN, Galindo hoy no sería nadie.
Su encuentro con el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Alejandro Moreno Cárdenas, junto con integrantes del Comité Directivo Estatal encabezado por Ma. Sara Rocha Medina, significó en la práctica su reinstalación como el “primer priista del estado”.
En la reunión celebrada el pasado viernes en la sede nacional del PRI en la Ciudad de México, a petición de “Alito” Moreno, Rocha y Galindo acordaron que en unidad enfrentarán el reto de volverle a dar vida al tricolor en San Luis Potosí.
Es decir, reconocieron que el otrora partido de las mayorías está irremisiblemente en etapa crítica y terminal.
A decir de Galindo, “me recibió el presidente con muy buena camaradería y me dijo: hagamos borrón y cuenta nueva y empecemos a recuperar al PRI de San Luis”.
Juntos, Rocha y Galindo intentarán reconstruir un partido desfondado, que desde hace años entró en picada al abismo al acumular sendos descalabros electorales, cuyos resultados a nivel nacional y local lo ubican como una minoría en decadencia.
Consideran ilusamente que el problema del partido es la división interna y que con una convocatoria a la unidad es más que suficiente para empezar a darle vida. Se equivocan: el gran problema del PRI es que la ciudadanía no lo ve como una alternativa de gobierno.
De acuerdo con resultados de encuestas de preferencia por partidos de Enkoll y El Financiero, a septiembre presente, el PRI alcanzó 85 y 78 por ciento de rechazo, respectivamente. Nunca antes el tricolor se había enfrentado a tal repulsa popular.
Desde el 2018 ese partido cayó en un tobogán electoral que no se ha detenido: de 32 entidades federativas, únicamente gobierna dos en la actualidad y eso, gracias a su alianza con el PAN y el desaparecido PRD.
Moreno Cárdenas, artífice del reencuentro Rocha-Galindo, ha perdido 12 gubernaturas y cayó en el Congreso de la Unión hasta la cuarta posición con presencia legislativa. De no ser por la alianza con el PAN, así como las plurinominales y la representación de primera minoría, no habría priistas en el Poder Legislativo.
En 2024, el PRI no ganó uno solo de los 300 distritos federales electorales de mayoría en el país y en San Luis no ganó ninguno de los 15 distritos locales de mayoría.
Es un partido en la debacle y pese a ello, Galindo Ceballos le ha dicho no al PAN como su real opción para encauzar su proyecto político al 2027.
Hasta antes de esa reunión con su presidente de partido, Galindo Ceballos había refrendado durante diversas entrevistas en el marco de la presentación de su primer informe de gobierno de este lunes, que “claro que quiero ser gobernador”, aunque admitía no saber qué partido lo podría postular.
Según Galindo, no está descartada una coalición pues afirmó que en ese caso “San Luis se cuece aparte” pues da por hecho que el PAN lo seguirá respaldando.
Pero no será así.
Jorge Herrera Romero, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN confirmó que no habrá alianza con el PRI en 2027: “nuestra ruta es competir en solitario, ya que forma parte de la nueva etapa de reconstrucción interna y porque la mayoría de militantes y liderazgos han solicitado desmarcarse y participar con nuestros propios cuadros”.
En estados como Querétaro, Hidalgo, Puebla y Nuevo León, el PAN ha anunciado que no hará alianza con el PRI.
De hecho, el blanquiazul está en diálogo con Movimiento Ciudadano para acordar una alianza electoral para las diputaciones federales y gobiernos estatales, pero en todo caso, con panistas encabezando la mayoría de candidaturas.
El reencuentro de Enrique Galindo con su partido, apurará al Comité Estatal a definir su posición respecto a la gubernatura pues el alcalde ya decidió quedarse en el PRI con todas las consecuencias que ello le traiga consigo.
Su derrota es previsible: en este momento, la intención de voto para el PRI por la gubernatura va del 6 al 9 por ciento.
El edil parece haber escogido el peor de los caminos al reinsertarse a un partido que hoy vale un cacahuate en términos de posicionamiento electoral.
A menos que el PRI sea uno de los cuatro partidos que integren con el PVEM una coalición ganadora, como lo adelantó el gobernador José Ricardo Gallardo Cardona.
Ya lo dijo Galindo en razón a su reacomodo en el PRI: “Esto cambia todo el escenario”.
El tricolor buscará sobrevivir en el 2027 y mantener su registro nacional y estatal. Su alternativa más viable es aliarse con la Gallardía para ir contra Morena y el PAN. De ser posible, erigirse como segunda fuerza electoral detrás del Verde.
Inédito panorama: el PRI como rémora del Verde; reconstruirse a la sombra de la Gallardía.
Mis apuntes
Informe capitalino. Con el lema “Razones para amar a San Luis”, el alcalde Enrique Francisco Galindo Ceballos rendirá este lunes su primer informe del trienio 2021-2024. La ceremonia será en el Centro Cultural Bicentenario de la UASLP. Con independencia del mensaje, en la mente de las y los capitalinos estarán presentes las escenas caóticas que dejaron las lluvias del pasado viernes: la ciudad inundada por enésima ocasión. La infraestructura hidráulica capitalina no da más, mientras que la propaganda municipal resalta “cuatro años de resultados”.
La oposición también es claudista. Ciudadanas y ciudadanos con identidad panista, priista y emecista aprueban el mandato de la presidenta Claudia Sheibaum Pardo. Una encuesta de la empresa Enkoll realizada para la edición México del diario español El País y W Radio, reveló que el 65 por ciento de encuestados identificados con el PRI, avalan a la presidenta. En el PAN, 60 y en MC, 64 por ciento respectivamente, aprueban el primer año de gobierno de Sheinbaum. Mientras que las dirigencias partidistas opositoras despotrican a diario contra la cuarta transformación al afirmar que México vive el régimen autoritario de un “narcogobierno”, sus simpatizantes opinan lo contrario.
Paciencia monacal. Es la que ha de abrazar a Alejandro Javier Zermeño Guerra. El rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí cumplió dos semanas esperando una llamada desde palacio de gobierno para reactivar el diálogo en “Mesas de trabajo”, en los hechos inexistentes. Tres semanas después de dos encuentros, no ha habido nada más. El rector dice que espera que “en cualquier momento nos hablen”. Podrá permanecer cruzado de brazos en espera de que lo citen en la Secretaría General o en la de Finanzas. Mal, muy mal por el doctor que parecía haber dado pasos firmes en la exigencia del pago del adeudo oficial. La comunidad universitaria no ha de estar muy contenta con la postura de nuevo pusilánime. A punto de cerrar septiembre, no hay información oficial de que el gobierno ha entregado las ministraciones correspondientes a este mes. Debe entregar 74 millones 376 mil 647 pesos y hasta ayer, el reporte es que no se transfirió nada. Paciencia monacal del rector quien no debe olvidar que él es patrón de las y los trabajadores administrativos y académicos de la universidad y que, en todo caso, él será el responsable en el momento en que no se cuente con recursos para el pago de salarios y prestaciones.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Ha sido docente de la Facultad de Ciencias de la Comunicación durante 25 años. Además, durante 30 años se ha desempeñado como periodista en medios como El Heraldo, El Mañana de Ciudad Valles, Pulso, Milenio San Luis, Diario Digital San Luis, Librevía, La Jornada, Global Media y actualmente en Astrolabio Diario Digital y Periodismo Político.com. También ha sido corresponsal de medios nacionales como Agencia de noticias Notimex, La Jornada y Milenio.