Su sueño era casarse con el amor de su vida y se hizo realidad, gracias a 20 mil euros donados por lectores del semanal Sunday People, pero semanas después falleció en brazos de su esposo.
Courtney Webb. de 27 años, desafió todos los pronósticos para casarse, con su media naranja, Bill en la que fue la boda de sus sueños. Seis semanas después, Courtney, víctima de una forma rara de cáncer dejó este mundo, a su esposo y a Dolcie, su hija de 5 años.
De acuerdo al portal mirror.co.uk, Bill, también de 27 años, dijo lo siguiente:
“Ella puso su cabeza en mi pecho y se durmió en mis brazos como lo había hecho mil veces antes.”
“Pero sabía que esta vez no iba a despertar. Solo la abracé.”
“Nunca podré estar lo suficientemente agradecido a todas las personas que hicieron su sueño realidad. Mi Courtney era inquebrantable, valiente, fuerte, pero lo más importante es que era feliz y falleció tras hacer lo que más quería en todo el mundo.”
“El lema de Courtney era que nunca dejaría que el cáncer la venciera y en el final fue así. Se fue en sus términos, en paz, en los brazos de su esposo.”
“Al final ella ganó.”
Ella planeaba casarse con Bill en noviembre, pero los doctores le informaron que no tendría tanto tiempo.
Con la ayuda de donadores fue posible tener la boda en julio de este año, lo que mostró ser de suma importancia, debido a su constante deterioro de salud.
“La boda fue perfecta y ella lucía perfecta”,expresó Bill.
Para Bill lo más difícil fue decirle a su hija que su madre había fallecido.
“Tras su muerte, Dolcie salió al parque con su tía, para hablar con la funeraria y pudieran atender al cuerpo de Courtney. Ella regresó cuando se fueron los trabajadores y sabía que tenía que hablar con ella”.
“La puse sobre mi rodilla y le dije: ‘¿Sabes cómo estaba mala mamá? Los ángeles se la han llevado para el cielo para estar con ellos.’”
“Se soltó en llanto y me apretó más fuerte que cualquier otra persona lo había echo.”
“Esa noche me dio una tarjeta que decía. ‘Te amo mama’ con dos besos y un corazón en la parte de atras.”
“Me dijo es una tarjeta para mamá, que la pondría debajo de la almohada para que los ángeles se lo llevarán a ella”:
“En la noche, cuando dormía, tomé la tarjeta. Por la mañana, entró corriendo ‘¡Mamá recibió mi tarjeta!’ Me rompió el corazón, pero nunca quiero que olvide a Courtney, a su madre.”
