Lo que hay tras un semáforo rojo

Por Victoriano Martínez

Preocupante resulta que desde hace tres años los focos aparecen en rojo en el Semáforo Delictivo para San Luis Potosí, tanto estado como municipio de la capital.

Desde enero de 2015, el portal www.semaforo.com.mx registra la situación de inseguridad en el país con un sistema de semáforos para once tipos delictivos.

Homicidios, Secuestros, Extorsión, Narcomenudeo, Robo a vehículo, Robo a casa, Robo a negocio, Lesiones, Violación, Violencia Familiar y Feminicidios son los delitos evaluados.

Que la constante sea aparecer en rojo en la mayoría de los casos favorece a una actitud de resignación en la que simplemente se piense que ya sabemos que estamos mal.

Una resignación que, si nos quedamos con el dato escueto del seguimos en rojo, difícilmente podrá abrirse paso a una mayor indignación ante la poca efectividad con que han actuado las autoridades.

La percepción de inseguridad también ha crecido, y tiene que ver con los detalles de la información que proporciona el Semáforo Delictivo.

Una comparación de las cifras por delitos que han mantenido la gran mayoría de los semáforos en rojo para el Estado y la ciudad (tablas al final del texto) muestran que ese color sique ahí porque la comisión de los delitos van en constante aumento.

En todos los delitos hubo incremento, salvo en los secuestros que se mantuvieron igual.

Comparado con octubre de 2015, el mes pasado los homicidios aumentaron un 35.6 por ciento, las extorsiones un 85.71 por ciento, el narcomenudeo un 600 por ciento, el robo a vehículos un 379.75 por ciento, el robo a casas un 110.29 por ciento.

El robo a negocios aumentó un 293.88 por ciento, las lesiones un 69.57 por ciento, los casos de violación un 108.33 por ciento, la violencia familiar un 159.71 por ciento y los mientras en octubre de 2015 no se registraron feminicidios el mes pasado hubo tres.

En el caso de la capital, el número de homicidios el mes pasado se mantuvo igual que en octubre de 2015, los secuestros aumentaron un 50 por ciento, las extorsiones disminuyeron un 20 por ciento, el narcomenudeo creció un 2 mil 800 por ciento, el robo a vehículo un 417.78 por ciento, el robo a casas un 72.73 por ciento.

El robo a negocios aumentó un 263.64 por ciento, las lesiones un 70.59 por ciento, las violaciones un 45.45 por ciento, la violencia familiar un 114.06 por ciento.

Se trata de las cifras atrás de los semáforos de alerta que muestran que el rojo es cada vez más intenso y que se requiere una reacción de la autoridad con mayor efectividad en el combate a la inseguridad.

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