Reconocimiento de la Ruta Wixárika por la UNESCO no afectará proyectos en SLP: Gallardo

Desiree Madrid

Luego de que se confirmara que la Ruta Sagrada Wixárika será integrada a la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, el gobernador del estado, Ricardo Gallardo Cardona, aseguró que esta designación no interferirá con proyectos futuros de infraestructura o desarrollo en San Luis Potosí.

Al contrario, dijo que se trata de una medida que otorgará certeza legal y protección a las comunidades y al patrimonio natural y cultural del Altiplano.

Gallardo afirmó que no existe ningún riesgo para las obras públicas o privadas proyectadas en el estado, ya que el reconocimiento por parte de la UNESCO no implica restricciones que afecten directamente los planes del Ejecutivo.

“Ninguno, para nada, no. Al contrario, se trata de darle certeza legal a toda la gente, a los pobladores de sus ejidos, de sus tierras”, expresó el mandatario.

La Ruta Sagrada Wixárika atraviesa varios municipios de San Luis Potosí, así como de otros estados, y forma parte del trayecto espiritual que cada año recorre el pueblo Wixárika para rendir tributo a sus sitios sagrados.

Uno de los puntos más emblemáticos es el Wirikuta, ubicado en la zona Altiplano, que históricamente ha sido foco de conflictos por intereses mineros y de conservación ambiental.

El gobernador anunció que en los próximos días se realizará un evento de gran escala en el municipio Catorce, con la presencia de autoridades federales y representantes de la UNESCO. En ese encuentro se definirán las zonas específicas que quedarán bajo protección oficial, así como las áreas naturales a preservar.

Además del reconocimiento cultural, Gallardo reconoció que existe una problemática creciente: la extracción ilegal de flora y fauna en áreas sagradas, como las cactáceas y otras especies endémicas.

“Vemos una desbandada de estar sacando cactáceas, de estar sacando fauna silvestre de los lugares sagrados y eso a nadie le conviene”, advirtió.

El reconocimiento de la Ruta Wixárika por parte de la UNESCO ha sido bien recibido por defensores del medio ambiente y representantes indígenas, aunque también genera expectativa sobre el verdadero alcance del compromiso gubernamental con el respeto al territorio y a las prácticas culturales ancestrales.