El museo de la ignominia

El Catalejo es el resultado de las mentes desorientadas de los reporterillos de Astrolabio Diario Digital

Desde que los partidos políticos dejaron de competir para proponer las mejores soluciones a los problemas de la sociedad para, de manera vil, pelearse por los cargos públicos como si fueran un botín, la exhibición de su voracidad se da totalmente sin limites y sin el más mínimo respeto a la dignidad ciudadana, tanto de los electores a quienes los reducen a votos como a la de ellos mismos, al exponerse como lo más bajo y despreciable… porque, para colmo, dejan abierta la posibilidad de ser más viles aún, aunque ya no parezca posible. Viles hasta la ignominia.