Juventudes llaman a actuar frente a la crisis climática desde lo local

Fernanda Durán

Con un llamado a abandonar la inercia institucional y a asumir la crisis climática como un desafío presente e ineludible, este jueves se inauguró la primera Cumbre Climática Juvenil de San Luis Potosí, un espacio impulsado por colectivas y delegaciones juveniles con enfoque en acción local, resiliencia ambiental y justicia climática.

Durante el acto inaugural, la directora de la Agenda Ambiental de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), María Isabel Lázaro Báez, advirtió que hablar de cambio climático ya no puede quedarse en lo discursivo.

Afirmó que, si bien desde 2015 se trazó una hoja de ruta global hacia el año 2030, la mayoría de los compromisos no se han cumplido.

“Hablábamos de no rebasar los 1.5 grados de aumento en temperatura; hoy, en muchos lugares, ese límite ya ha sido superado”, señaló.

Para Lázaro, es evidente que la juventud actúa ante el vacío que han dejado otros actores e iniciativas como esta Cumbre representan una respuesta urgente, nacida desde la sociedad civil.

En representación de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental del Estado (Segam), el doctor Raymundo González coincidió en que la etapa de la mitigación climática ya fue rebasada y ahora el enfoque debe ser la adaptación a nuevas condiciones que afectan directamente la vida cotidiana, desde fenómenos meteorológicos atípicos hasta el colapso de servicios ecosistémicos.

El funcionario insistió que la responsabilidad no recae solo en autoridades, sino en cada persona.

“Desde el hecho de ser humanos ya generamos residuos, somos parte del problema, pero también podemos ser parte de la solución si asumimos nuestra corresponsabilidad ambiental”, afirmó.

González hizo un llamado a que los jóvenes participantes no se limiten a escuchar o cumplir formalidades, sino que cuestionen, propongan y exijan mejores políticas públicas.

Por su parte, la coordinadora general de la Cumbre, Gloria Charqueño, compartió que el evento nació de una inquietud personal: la ausencia de espacios de articulación juvenil en el estado que permitieran generar propuestas con alcance nacional e internacional, pues luego de participar en encuentros como la Local Conference of Youth (LCOY) y la Regional Conference of Youth en Brasil, se propuso replicar esa experiencia en San Luis Potosí.

“No necesitamos esperar a que llegue el 2030; el cambio tiene que comenzar ahora, desde aquí”, enfatizó.

También subrayó que la Cumbre busca construir comunidad, tejer redes y poner en común los esfuerzos que ya existen a nivel local.

La conferencia magistral inaugural estuvo a cargo de la bióloga Mariela Morales, originaria de Nuevo León, quien centró su participación en el papel de las juventudes en la conservación de la biodiversidad.

Morales criticó la escasa presencia de perfiles científicos en espacios de toma de decisiones y llamó a las y los jóvenes con formación técnica a involucrarse activamente en el diseño de políticas ambientales.

“Muchas veces se toman decisiones sin asesoría especializada, y eso repercute en estrategias mal diseñadas o en la omisión de datos cruciales”.

Durante la conferencia enfatizó en la dimensión emocional del activismo ambiental, especialmente la ecoansiedad, un fenómeno que afecta a muchas personas jóvenes ante la percepción constante de catástrofes inminentes.

Morales propuso no evadir esa emoción, sino canalizarla en acciones locales posibles, recordando que “no se puede conservar lo que no se conoce, ni amar lo que no se comprende”.

Asimismo, invitó a las y los asistentes a conocer el marco legal vigente como la Ley General del Equilibrio Ecológico y la NOM-059 para utilizarlo como herramienta para sustentar sus propuestas.

La Cumbre Climática Juvenil continuará con mesas de trabajo, talleres y foros durante el viernes, con la participación de más de 50 jóvenes seleccionados por su trayectoria en temas como agua, cambio climático, biodiversidad y resiliencia comunitaria.

Se espera que los resultados del encuentro contribuyan a construir una agenda ambiental juvenil desde San Luis Potosí con impacto territorial.