Maribel Lemoine acusa “informe de mentiras” y falta de consenso en Villa de Pozos

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Fernanda Durán

Luego de abandonar la sesión solemne del Concejo Municipal de Villa de Pozos, la concejala regidora Maribel Lemoine Loredo sostuvo que su decisión fue resultado de un análisis previo y de la inconformidad con la manera en que se condujo la presentación del primer informe anual de actividades.

“Fue una decisión verdaderamente consensada y pensada [entre los regidores que salieron de la sesión] porque Villa de Pozos, desde su creación, tenía muchas deficiencias y hoy no hay un trabajo real para resolverlas”, comentó en entrevista tras no asistir al evento del municipio, realizado este martes en la plaza las águilas.

Lemoine Loredo explicó que durante un recorrido realizado un día antes observó pendones en postes del municipio en los que se anunciaban inversiones por 300 millones de pesos en obra pública, 28 patrullas y nuevos programas deportivos, pero esas acciones no son verificables.

“El informe es un documento a color, con fotografías muy bien hechas, pero que no refleja la realidad”, afirmó al subrayar que los concejales nunca fueron consultados sobre la planeación ni autorizaciones de esos proyectos.

En contraste, enlistó carencias y rezagos en diversas zonas de la demarcación; mencionó que en Bosques de las Flores se dejaron obras inconclusas; en las calles 30 y 24, esquina con la 90 y con la 101, apenas se cubrieron baches con desperdicio de asfalto; y en Llano de Santa Rita y San Javier persisten “megabaches” que dificultan la movilidad.

También indicó que en horas pico la vialidad colapsa y la falta de capacitación de los agentes de tránsito agrava el caos vial y llegar incluso a generar enfrentamientos entre automovilistas.

La concejala acusó además que los integrantes del cabildo han sido relegados en la toma de decisiones y que el Concejo “se ha convertido en un Concejo de papel”, por esta razón señaló directamente a la presidenta municipal, María Teresa de Jesús Rivera Acevedo, por no atender a los concejales ni rendir cuentas claras sobre el uso de recursos públicos.

“No tiene la dignidad ni la fuerza de encararnos y decirnos cómo se están haciendo las cosas”, afirmó.

También criticó la designación de directores sin preparación adecuada y la falta de atención a problemas estructurales como el destino de la basura y la transparencia administrativa, pues incluso se ha solicitado la destitución de funcionarios en esas áreas sin que las demandas prosperen.

“Si tú aceptas un cargo para el cual no estás preparado, se le llama corrupción”.

Pese a sus señalamientos, Lemoine reconoció avances en materia de recaudación, principalmente el trabajo del tesorero municipal. No obstante, el problema central es la ausencia de consensos en el cabildo y la conducción unilateral del gobierno local.

“Ella tiene una gran oportunidad de hacer grandes cosas, pero se gobierna con tres personas. Así es imposible que un ayuntamiento pueda cambiar”.

Al concluir, subrayó que el Concejo cuenta con perfiles con experiencia política y administrativa que no han sido aprovechados, por ejemplo, los exdiputados como René Oyarvide Ibarra y Nadia Ochoa Limón, ex síndicos como ella y profesionales con doctorados y trayectoria jurídica como Dante Alan Carreón.

“Si se tomara en cuenta la preparación y conocimiento de este cabildo, Villa de Pozos sería un municipio maravilloso. Pero hoy se gobierna desde el desdén y no desde el consenso”.