Ciudad de México (24 de junio de 2016).- Una investigación de la organización Mexicanos Contra la Corrupción, reveló que dos constructoras de familiares cercanos (hijos, sobrinos y parientes políticos) al extitular de la PGR, Jesús Murillo Karam, y una más cercana aún al exprocurador, obtuvieron contratos de obra por 4625 millones de pesos (300 millones de dólares aproximadamente), durante los tres años en los que ocupó el cargo dentro del gabinete presidencial de Enrique Peña Nieto.
En este periodo de tiempo, las empresas Alvarga, Kuoro e Itrio multiplicaron en 714 por ciento sus contratos de obra pública, los cuales fueron principalmente con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a cargo de Gerardo Ruiz Esparza.
La investigación también muestra como estas empresas dejaron de ser consideradas en las licitaciones cuando Murillo Karam dejó el cargo en la PGR, tras una administración en la que será recordado por su frase sobre la supuesta “verdad histórica”, referente a la desaparición de 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, en la que aseguraba que estos habían sido asesinados y quemados en el basurero de Cocula.
Por ejemplo, a partir de que Murillo Karam pasó a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), tras ser removido de la PGR, los dividendos de esas tres firmas se vinieron abajo en el sector público.
Tras la revisión de 43 contratos asignados a las empresas relacionadas al exprocurador en 17 estados de la República, se hallaron diversas irregularidades como aumentos injustificados en precios, adjudicaciones directas irregulares, obras entregadas a destiempo, fraude, e incluso un caso en Campeche que revela que se usaron productos que no cumplen las normas para la construcción de un rompeolas.
Los documentos revisados revelan que al menos el 61 por ciento del monto de los contratos (2837 millones de pesos) fueron otorgados por la SCT, principalmente en obras carreteras y portuarias.
Entre los elementos que apuntan a un conflicto de interés en los contratos otorgados, se encuentra el hecho de que Gerardo Ruiz Esparza es el padre que Gerardo Ruiz Dosal, quien fuera secretario particular de Jesús Murillo Karam durante el periodo en que éste fue titular de la PGR, de diciembre de 2012 a febrero de 2015.
Entrevistado al respecto, el subsecretario de Infraestructura de Comunicaciones y Transportes, Raúl Murrieta Cummings, negó que ese vínculo influyera en los contratos. “Yo no recibo instrucciones del hijo (de Ruiz Esparza)”, dijo el funcionario a un medio nacional.
Fuente: NW Noticias. (Por Jesús García López y Cristina Muñoz)
