Caracas, Venezuela (02 de junio de 2016).- Empresas Polar, el atribulado conglomerado venezolano de alimentos y bebidas dijo el miércoles que reactivará sus operaciones de cerveza al asegurar un préstamo para pagar por las importaciones de la cebada malteada y el lúpulo que necesita para fabricar la bebida.
Polar, la empresa privada más grande de Venezuela, cerró sus cuatro plantas de cerveza a finales de abril, asegurando que el gobierno no había puesto dólares a disposición a través de su restrictivo sistema de control de divisas para que la compañía comprara las materias primas importadas. Las operaciones cerveceras de la empresa, que producían 80% de la cerveza consumida en el país, representan 40% de las ventas de Polar.
Sin embargo, Lorenzo Mendoza, el presidente de la compañía, dijo en un comunicado que había “encontrado una solución temporal” para permitir que Polar reactivara sus plantas en julio y operara hasta finales del año. Polar recibirá un préstamo de US$35 millones del banco español BBVA, usando como garantía inversiones que Polar tiene desde 1984 en Inversiones Banpro International Inc. NV Curaçao, dijo el comunicado. El préstamo debe ser pagado en seis meses, dijo Polar.
No obstante, Mendoza señaló que Polar necesita acceso a dólares para operar, algo que se ha vuelto cada vez más difícil en un país en el que un gobierno necesitado de efectivo controla todo el acceso a la divisa estadounidense. En teoría, el gobierno del presidente Nicolás Maduro pone el dinero a disposición de las empresas, desde fabricantes de autos hasta farmacéuticas, para que puedan pagar por partes importadas y materias primas.
Sin embargo, ahora que las reservas extranjeras de Venezuela han caído a un tercio de lo que eran en 2009, el gobierno no ha sido capaz de proveer suficientes dólares, lo que ha conducido a una escasez crítica de medicinas y de muchos alimentos básicos. La economía del país se ha tambaleado debido a la mala gestión, la corrupción y, más recientemente, la caída de los precios mundiales del petróleo. El país es un gran productor de crudo.
Debido a la escasez, los venezolanos hacen fila fuera de los supermercados por horas. El Fondo Monetario Internacional dice que la economía se contraerá 8% este año y la inflación de tres dígitos del país es la más alta del mundo.
Al mismo tiempo, una amplia variedad de empresas ha anunciado su salida del país, al no poder comprar materias primas. Entre las más recientes se encuentra Coca Cola, que no pudo producir su bebida debido a la escasez de azúcar y Bridgestone. Dos grandes aerolíneas, la chilena Latam y la alemana Lufthansa anunciaron recientemente que suspendían sus vuelos a Caracas.
Polar dice que trata de evitar la suerte de otras empresas. “Empresas Polar está demostrando con hechos que está comprometida con los venezolanos”, dijo Mendoza en el comunicado, pero agregó que la producción no puede depender de “soluciones extraordinarias, todo lo contrario, cada día debe haber más y mejores condiciones para invertir y crear valor en nuestro país”.
Funcionarios del gobierno venezolano no devolvieron llamadas y correos electrónicos que buscaban sus comentarios. Públicamente Maduro y otros funcionarios acusan a Mendoza de acaparar suministros como parte de un plan para desestabilizar al gobierno. El gobierno nunca ha presentado evidencia de sus acusaciones y en repetidas ocasiones se ha negado a dar detalles.
El viernes, el economista español Alfredo Serrano, un asesor de Maduro al que el presidente llama “el Jesucristo de la economía”, defendió los controles de divisas del país y culpó a una “guerra económica” organizada por los adversarios de Maduro de los problemas de Venezuela. En los últimos días se ha librado un vigoroso debate entre algunos funcionarios del gobierno sobre si unificar la tasa de cambio, una propuesta que los economistas dicen debería haberse adoptado hace años.
”Si empiezas con el debate de la unificación cambiaria es como hacer trampas en el solitario”, dijo Serrano en una entrevista en el foro Dilemas Económicos de América Latina, patrocinado por una universidad estatal en Caracas.
Cuando se le preguntó por la distribución de dólares, dijo que era importante que las empresas pequeñas y medianas recibieran dinero. “Es fundamental que el reparto de los dólares, que son pocos, sea inteligente y se otorgue una parte a las pequeñas y medianas industrias”, dijo Serrano. Además indicó que los funcionarios determinarían qué empresas serían las mayores generadoras de riqueza y canalizarían dinero hacia ellas durante los próximos seis meses.
Fuente: El periódico de México.
