Valladares, el As bajo la manga de Gallardo

Por Edgardo Pérez Alvelais

Dicen que Dios siempre perdona, los hombres algunas veces, pero la naturaleza y el tiempo nunca. Al igual que en el juego de ajedrez, la política es un problema de material –piezas y recursos–, espacio y tiempo. El año 2023 que feneció fue el tiempo de la consolidación del poder de Ricardo Gallardo Cardona como gobernador de San Luis Potosí, pero el 2024 es el lapso de acrecentarlo y preparar la segunda mitad de su mandato que culminará en la sucesión gubernamental del 2027. Muchos y hasta él mismo se habían descartado, pero parece ser que Juan Carlos Valladares Eichelmann siempre sí se animará y se registrará como precandidato para contender por la alcaldía capitalina poniendo en predicamento a tirios y troyanos. 

En 2015 nadie pronosticó que el Pollo Gallardo resurgiría de las cenizas como el Ave Fénix. El día de su detención, la llamada herencia maldita –por él definida y estigmatizada desde su toma de protesta–, o la mafia del poder prianista local, habría logrado sacarlo a la mala de la jugada. Sabían que podía ganar. Desde Bucareli operaron su detención con Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación de Enrique Peña Nieto, que mandó a Tomás Zerón, entonces director de la extinta Agencia de Investigación y hoy prófugo de la justicia escondido en Israel, quien lo detuvo y lo encarceló.

En el mismo círculo de Gallardo Cardona se sabe que fue una especie de “secuestro político” para facilitar el ascenso al poder del anodino Juan Manuel Carreras López que iba perdiendo la gubernatura frente a la candidata panista Sonia Mendoza Díaz que ahora, al igual que el exalcalde soledense Gilberto Hernández Villafuerte y al parecer el exitoso secretario de Desarrollo Económico, quieren lograr la presidencia municipal de San Luis Potosí por el Partido Verde.

La guerra sucia contra la matehualense incluyó sacarle trapitos sucios y ventilar detalles de su vida familiar. La pinza a favor del insípido güerito se dio a través de una macabra operación en donde el gallardismo lo apoyó en zonas conurbadas dándole un vital empujoncito con votos de su base social que le pudiera dar la vuelta a la tortilla como así sucedió, parte de una innombrable negociación para liberar de las mazmorras al que nadie sabía sería el próximo gobernador de San Luis Potosí, en una historia que bien podría ser una exitosa serie de Netflix.  

Es pertinente traer a la memoria todos esos detalles por lo que viene y ha pasado. San Luis Potosí ha sido un laboratorio político desde donde se han ensayado represiones e intentos reeleccionistas como la de Carlos Salinas de Gortari con el fallido intento de Gonzalo Martínez Corbalá en 1992 por quedarse en la silla gubernamental.

Basta recordar que, en la noche del 15 septiembre de 1961, francotiradores dispararon contra la multitud navista congregada en el centro histórico de San Luis Potosí. Los balazos, cuyos orificios aún se pueden observar en partes de la cantera rosa de edificios coloniales de la Plaza de Armas, iniciaron al arribo de la tropa.

En la represión contra los estudiantes, el 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas, pasó algo similar. Tres bengalas iluminaron el cielo y fue la señal para que comenzara el ataque desde lo alto del edificio Chihuahua por parte de halcones del temible Batallón Olimpia, distinguidos con un guante blanco en una de sus asesinas manos, que activaron sus armas desde arriba hacia abajo contra la indefensa multitud que también estaba conformada por mujeres y niños. No les importó.

Otro histórico ejemplo: Hoy primero de enero se cumplen 38 años de la terrible golpiza de 1986 contra opositores navistas que en el quiosco de la Plaza de Armas protestaban contra el fraude electoral cometido en contra del Ing. Guillermo Pizzuto Zamanillo para imponer como edil capitalino a Guillermo Medina de los Santos, prominente miembro del Centro Empresarial y Grupo Universidad.

Copiando el “modelo” represivo de los halcones del Jueves de Corpus del 10 de junio de 1971 en la Ciudad de México, que eran paramilitares que golpearon a los estudiantes con varas de bambú y palos de kendo, aquí nuevamente, al frente y a los costados de Palacio de Gobierno, policías y porros al mando del policía judicial Julio Ceballos, reprimieron con palos al pueblo potosino que protestaba. También incendiaron el Palacio Municipal y mancillaron la entrada de la Catedral potosina.

Los videos están en Youtube. Aquí hay uno donde el periodista Samuel Bonilla de Canal 13, hace la terrible narración de los hechos. Lo curioso es que los reporteros y camarógrafos al mando de Juan José Rodríguez Medina, alías “el tigre”, entre los que se encontraba Martín Vega Cázares, libremente pudieron registrar y grabarlo todo sin que nadie los molestara. Algo atípico completamente.

Por lo general los represores van, te golpean, te quitan cámaras, rollos Kodak de ese entonces y videos. Posteriormente, ese video, de formato tres cuartos, dio la vuelta al mundo, fue comercializado, y sirvió para que a la postre cayera el defenestrado gobernador Florencio Salazar Martínez que mantenía una sórdida pelea con el poderoso líder magisterial y exmandatario, Carlos Jonguitud Barrios. En su poema Ajedrez, que también aplica a la vida y a la política, Jorge Luis Borges escribió: “Dios mueve al jugador, y éste, la pieza. ¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza de polvo y tiempo y sueño y agonía?”.

En la UASLP también se cuecen habas

Políticos y periodistas de antes decían que “quien controla a la Máxima Casa de Estudios lo controla todo”. El Lic. Alfonso Lastras Martínez, alias “el Diablo”, lo entendió y movió a los estudiantes. Un fatídico viernes 9 de mayo de 1986, con el asesinato de Jorge Mena Ortiz, estudiante de la Facultad de Derecho, ultimado de un certero balazo en el corazón, fue el inicio de su ascenso al poder. El crimen hizo estallar un movimiento que culminó con la renuncia del rector José de Jesús Rodríguez Martínez, alias “el Popo”, en el mes de septiembre de ese mismo año.

Si ligamos el análisis anterior sobre las represiones en la Plaza de Armas, la caída de Florencio Salazar –el presidente Miguel de la Madrid le ordenó dimitir pidiendo licencia como gobernador constitucional de San Luis Potosí–, y la ejecución de Jorge Mena, los hilos nos conducen al nombramiento de Leopoldino Ortiz Santos como gobernador sustituto el 25 de mayo de 1987.

Al exmagistrado Leopoldino, a través de Juan Ramiro Robledo Ruiz y luego Alejandro, alias “el Caco” Leal, ambos operadores de Lastras, le correspondió afrontar el conflicto postelectoral luego del fraude electoral cometido en contra del Dr. Salvador Nava Martínez para imponer al echeverrista Fausto Zapata, alias “la Rata”, Loredo a quien Carlos Salinas de Gortari, alias “el Pelón del averno”, también ordenó dimitir para detener la Marcha por la Dignidad a la Ciudad de México, negociación que encumbró a su maquivélico yerno, Horacio Sánchez Unzueta, alias “el Tribilin”, a la gubernatura de San Luis Potosí con el inicio del llamado Maximato que hoy quiere regresar al poder con Xóchitl Gálvez y Enrique Galindo Ceballos.

Horacio también se aventó un tiro con Lastras que lo quería controlar para impulsar a Juan Ramiro Robledo como sucesor. Le mandó tomar camiones del transporte público y concentrarlos en la Zona Universitaria para incendiarlos. Como gran estratega que siempre ha sido, Horacio previó, desactivó el golpe de Estado en su contra, sometió al malévolo rector, desactivó la rebeldía con dinero, alcohol, mujeres y eficientes operadores que contaban con comprometedora información obtenida con equipos de espionaje; mandó a los revoltosos a estudiar posgrados arreglados al extranjero y, finalmente, impuso a su compadre Fernando Silva Nieto en la gubernatura, ganando la feroz partida por el poder.  

A ese tipo de jugadores y sucesos se enfrentará Ricardo Gallardo Cardona. Debe de conocer la historia para no repetirla y sucumbir a ella. Dentro de sus propósitos de nuevo año debe controlar sus expresiones, ya no más anécdotas tipo “los amigos de palo” para que no entren moscas en su boca que le perjudiquen a él y a Claudia Sheinbaum. Necesita mover bien sus piezas, trabajar mucho, hacer más obra, repartir más dinero a la gente más necesitada, apoyar a la población con alguna discapacidad e incluso a las clases medias con los programas sociales y demostrar nuevamente que juventud es un divino tesoro y no una “enfermedad” que con el tiempo se cura.

Gallardo tiene a un lado a un rectorcito como Zermeño que no llega ni a ser ni caricatura del famoso Popo. No sólo es torpe y permite injusticias como las cometidas contra mujeres estudiantes que son víctimas de profesores acosadores y abusadores sexuales, sino en nivel de estudios desplomó el nivel académico de la Facultad de Medicina a la que mal dirigió y ahora en general daña el prestigio de la UASLP.

Tampoco quiere darse cuenta de la injusticia en contra del Maestro de cine Jorge Ramírez Pardo cometida por parte de un tal pelón, yerno del “pero te peinas cuñao” que también tiene a su hija en la nómina de Gobierno del Estado como titular del Archivo Histórico de San Luis Potosí. ¡Ese tipo aspira a ser rector! ¡Imagínense! Zermeño también permite abusivos sueldos de familiares de exrectores que cobran más que el gobernador del Estado y el presidente de la República. Zermeño ni siquiera se da cuenta que es manipulado por la herencia maldita que ahí se le enquistó. En fin, no tiene remedio.

Simultáneas

• El Chiquis mal asesorado. A pesar de su gran inteligencia, el diputado José Luis Fernández ha cometido errores que han llevado a la gente a pitorrearse de iniciativas del gobernador Gallardo. Pasó con el decreto del municipio 59 de Villa de Pozos que le fue tumbado con amparos; ahora sucede con el ordenamiento de no cobrar en los estacionamientos lo cual es letra muerta. Se lo pasaron por “el arco del triunfo” los dueños de las plazas comerciales por elementales violaciones a la propiedad privada; ahora un asesor de apellido Piña, que fue un nefasto secretario de Comunicaciones y Transportes de la herencia maldita, lo arrastra a otra pifia. Reformar el Reglamento Interno del Poder Legislativo para cambiar a la Jucopo con la figura de “la Compañía” tratando de acumular más poder. Ya lo estaremos documentando con detalles.

• Un hombre-lobo en San Luis. En los próximos días se agudizarán los juegos del hambre y en específico la guerra sucia contra Gabino Morales que está siendo muy mal asesorado por Leonel Serrato, el polémico y malagradecido tribuno que primero condenó al gallardismo al que le lambió las botas para luego volverle a tirar. Circula ya un completo expediente que contiene un resumen de todas las demandas por presuntos abusos sexuales y síntesis informativa de las notas al respecto publicadas desde el inicio del sexenio de AMLO que calificó todo como “pura grilla”. En estos días veremos qué sucede. Veremos si el exsuperdelegado sabe jugar Ajedrez Político, logra ser senador o se va al basurero de la historia. En esta liga ustedes pueden consultar el expediente.

• No malgastes la vida. El gobernador Gallardo reanuda actividades mañana martes 2 de enero. Prepara todo para entregar el puente de Prados de San Vicente y dar los golpes finales en la estrategia político electoral que le lleve a ganar la Capital de SLP y el mayor número de posiciones en juego. El triunfo de Claudia Sheinbaum, la famosa “megamadriza”, lo da por adelantado, pero no se confía. Necesita a Valladares para poner el último clavo al ataúd de la herencia maldita. Para que la cuña apriete, necesita ser del mismo palo. Desde este espacio deseamos el pronto restablecimiento de la salud del famoso Chiquilín que siempre le pone sabor al caldo político.

¡Hasta el próximo lunes! ¡Feliz Año Nuevo 2024! Me despido por hoy recordando a Benjamin Franklin que decía: “¿Amas la vida? Pues si la amas no malgastes el tiempo, porque el tiempo es el bien del que está hecha la vida”.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.