Abelardo Medellín
Para evitar que se presenten casos en que servidores públicos violenten de alguna forma a menores de edad, como en el caso de Alejandro N., ex trabajador del DIF estatal acusado de violación agravada contra un menor, se deben fortalecer las reglas que rigen a quienes laboran en los espacios asistenciales, señaló Oliver Castañeda Correa, procurador Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
Durante su vista a San Luis Potosí este viernes 22 de julio, Castañeda Correa comentó que se debe trabajar ante todo con las reglas respecto a la niñez, que rigen a quienes trabajan en los centros asistenciales, además de cuidar el ingreso y egreso de quienes van a los centros de asistencia a trabajar con las niñas y niños.
“No todas las personas pueden tener contacto con los niños que están en un centro asistencial por una cuestión de protección, debe haber motivos suficientes, sobre todo cuando un adulto tiene contacto”, afirmó.
El procurador comentó que las precauciones deben ser mayores cuando el adulto que tendrá contacto con los jóvenes asiste para brindar algún tipo de servicio.
Sobre el caso específico de Alejandro N., ex titular de la Procuraduría de la Defensa de las Personas Adultas Mayores, Gestión y Participación Social, el procurador dijo desconocer si hubo alguna omisión al permitir el contacto entre el servidor público y niño, pero aseguró lo siguiente:
“Cuando hay situaciones de esta naturaleza, invariablemente se tienen que denunciar y perseguir”.
Castañeda Correa recordó que cuando una procuraduría, o trabajador del centro asistencial o cualquier otra persona, detecta un caso de abuso contra un joven al cuidado del Estado, debe ser denunciado de inmediato y será la Fiscalía de cada estado la que investigue y judicialice el tema.
